lunes, 20 de febrero de 2012

Contaminación farmacológica del suministro de agua en Barcelona



El consumo del agua del grifo para beber puede ser uno de los grandes peligros para nuestra salud. El agua que abastece la ciudad de Barcelona está, otra vez, en el punto de mira. Hace algunos años el suministro se basaba en el agua de algunas minas de agua (la ciudad es rica en ellos), el suministro de El Llobregat y el del Besós. Los que tenían la mala suerte de beber agua procedente del Llobregat (la mitad sur de la ciudad) veían salir por sus grifos una sustancia lechosa y maloliente que para consumir como agua de boca debían dejar reposar unos quince minutos. Pasado ese tiempo se asentaba un soluto blanco y la parte superficial mejoraba algo su sabor y olía menos. De todas formas siempre se dijo que aquel exceso de derivados del cloro que se usaba para potabilizarla no debía ser demasiado bueno para la salud. Por otro lado los que tenían la suerte de beber agua de minas como la de la Font de Canyelles en Sant Andreu, tenían un agua de una calidad excelente, y algo menos buena era el agua del Besós. Desgraciadamente la entrada de roedores en las minas y las filtraciones freáticas, terminaron por hacernos perder el primer suministro. Respecto al Besós, durante los años 70 y 80 bajó tanto su caudal por sobreexplotación de sus afluentes, que se terminó por abandonar su uso. De todas formas, aunque se extrajo más agua a El Llobregat, era insuficiente para el suministro de toda la ciudad. Por eso se complementó con agua del Ter cuya calidad no era muy buena, pero sí superior a la que seguiría sirviendo al lado sur de la ciudad.
En la actualidad vuelve a entrar en la ecuación del suministro agua del Besós y, según se informó a la prensa, ahora se mezcla toda junto a la proveniente de la potabilizadora de agua marina de El Prat de Llobregat y que, supuestamente, debía aumentar la calidad del producto final.
Sin embargo, cuando hablamos del agua que se nos suministra y la comparamos con el agua embotellada vemos que están muy lejos de parecerse. Todo y que Aguas de Barcelona se ha preocupado mucho de que la mayor parte de los días su suministro no sea totalmente repugnante (posee hasta un equipo de catadores para lograr la mejor ecuación del sabor), es inevitable notar el sabor del cloro y, probablemente, el del flúor que se añade estúpidamente desde comienzos de los años 90. Hay que recordar que desde la divulgación de algunos apuntes sobre los experimentos de los Nazis, sabemos que la adición de flúor al organismo sirve reducir la capacidad de concentración de los individuos y tranquilizarlos. No tenemos datos respecto a dosis, ni cuáles son los verdaderos mecanismos de esos efectos, pero sabemos, sin lugar a dudas, que no estamos ante un aditivo inocuo. Incluso la razón por la que se adiciona esta sustancia al agua de muchas ciudades, la protección contra las caries dentales, está puesta en duda. De cualquier forma, las cantidades de cloratos, cloruros y fluoruros en el agua que se distribuye en nuestra ciudad seguro que cumplen lo estipulado por las reglamentaciones pertinentes. A ese respecto, si tuviéramos que quejarnos deberíamos hacerlo a los legisladores.
La función básica de los cloruros y cloratos, es la de eliminar los microorganismos patógenos que hubieren podido superar las primera fases de potabilización. En algunos países este proceso llamado cloración es substituido por la ozonificación y, muchas veces, acompañado por el uso de radiación ultravioleta. Estos procesos son muy apreciados en EE.UU. y dan como resultado unas aguas de mayor calidad en cuanto a sabor, pero son más caros y peligrosos, ya que el ozono (O3) tiende, por un lado a generar reacciones químicas muy violentas, y por otro a convertir una parte del agua en agua oxigenada (H2O2) que posee una elevada toxicidad (aunque no es que los derivados del cloro sean precisamente muy sanos). Sin embargo, de todos es sabido que dejando en reposo una mezcla de agua con agua oxigenada, esta última se va reduciendo poco a poco llegando, en un momento dado, a desaparecer completamente. Este proceso de reducción química se puede acelerar con el uso de un catalizador. Así el agua ozonificada nos obliga a tener grandes superficies de almacenaje para que el agua tenga tiempo de alcanzar su estado óptimo. Como en el proceso de almacenaje es posible que el agua  vuelva a desarrollar microorganismos susceptibles de ser patógenos, esta debe ser irradiada con luz ultravioleta en el momento de iniciar su distribución.
En cualquier caso, el problema que ahora nos preocupa no sería muy diferente se usara el que se usara como método de depuración. Se trata de las sustancias orgánicas e inorgánicas que van asociadas al agua. Las primeras fases de filtrado y sedimentación, garantizan la eliminación de todas aquellas que moléculas que no se disuelven perfectamente con el agua, incluso parte de las que si lo hacen. Los métodos a usar en todo el tratamiento y la cantidad y tipo de sustancias admitidas en el producto final para darle la consideración de potable al agua, está definido por el Real Decreto 140/2003 del 7 de febrero de ese año  y la orden del Ministerio de Sanidad y Consumo 3719/2005 del 21 de noviembre. La lectura de ambos documentos resulta una estéril forma de perder el tiempo, salvo que uno tenga pasión por los textos de ámbito legal. Su lectura, así mismo, no resulta todo lo tranquilizadora que uno debería desear ya que no especifica ni una sola barrera capaz de evitar un desastre como el que sospechamos ya se está dando en las aguas de nuestra ciudad. Todas las grandes medidas son siempre a toro pasado.
La cuestión es que, desde hace aproximadamente una década, se viene observando que los humedales del delta de El Llobregat están sufriendo cambios que empiezan en una variación de su fauna microbiana. Los primeros estudios ya alertaron de una alarmante cantidad e antibióticos sintéticos disueltos en el agua. Las autoridades se tomaron el problema muy en serio pero después de 10 años han perdido la pista en dos afluentes (Anoia y Cardener) donde ya es sabido que se están realizando vertidos ilegales de diferentes fármacos, aunque no se han logrado interceptar. Este problema no es exclusivo de este río, sino que según la OMS se está haciendo muy habitual en el mundo occidental, donde centenares de ríos, lagos y acuíferos muestran cantidades, incluso peligrosas, de sustancias farmacológicas. Sin ir más lejos se han detectado en el Ebro, el Ter y el Tordera, por nombrar algunos ríos catalanes.
Con todo, cuando esta noticia saltó a la prensa se nos hizo creer que el agua que se nos suministraba a los consumidores estaba a salvo. Se habló de continuados análisis para proteger nuestra salud. Pero he aquí que desde hace unos cuantos días el agua de consumo humano tiene un olor, cuando se usa en las variantes de spray (en microgotas) muy peculiar.
Es posible que si usted no es una persona olfativamente muy sensible no lo detecte, pero aquellas que si lo son y hayan consumido el metamizol (Nolotil) la identifiquen. La olor es repugnante y se produce por la mezcla de determinados derivados del cloro con una de las sustancias resultantes de metabolizar el metamizol. Cuando estas personas toman un comprimido de un medicamento que lo contiene, como el conocido Nolotil, durante varios días sufren repulsión al olor del agua del grifo y la lejía. Sin embargo, ahora, ese olor se puede detectar únicamente en el agua de nuestra ciudad, mientras que la lejía, sin mezclar con esa agua, sigue oliendo a la lejía de siempre.
Soy consciente de que la concentración del derivado del metamizol que se halla en el agua del grifo no puede ser muy grande, sin embargo la existencia de esta substancia demuestra que cualquier otra potencialmente más peligrosa (no es que el metamizol no lo sea, ya que su uso continuado puede producir agranulocitosis, que de no ser detectada a tiempo es mortal) puede llegar a nuestros grifos con cierta facilidad.
En cualquier caso, y durante los próximos días, en mi casa solo se va a beber agua mineral, pero tenemos un problema pues para cocinar el agua de grifo es necesaria y, aun substituyendo esta, no nos queda más remedio que lavar todo con esa agua contaminada y los residuos terminan llegando también a nuestro organismo.

Imagen sobre la degradación del metamizol extraída de la Wikipedia.

martes, 7 de febrero de 2012

Guatemala y Guatepeor tras el Congreso del PSOE



Entre Guatemala y Guatepeor el PSOE se ha quedado con el último. Y o mucho me equivoco o este acto puede ser el que marque el final del PSOE como alternativa de poder en nuestro país. Así de heavy’s están las cosas. Ya sabíamos que los “socialistas” (permítanme las merecidas comillas) no tenían ni idea de cuáles fueron las verdaderas razones de su fracaso, pero ahora vemos que tampoco es que les importe demasiado. Después de todo han tomado la alternativa del suicidio y la de la perpetuación de unos barones que, lejos de aportar nada al partido, solo sirven para acrecentar la tirria a sus siglas del votante independiente de izquierdas. Ante estas premisas, cómo no iba a felicitar el Partido Popular al vencedor de este malogrado Congreso.
Los que me siguen ya saben que la señora Chacón no es santo de mi devoción (valga el pareado). Sin embargo a nadie se le escapa que ella era la única opción posible de verdadera renovación en el partido. Nadie dice que la renovación hubiese sido la adecuada, pero, sin lugar a dudas, hubiese sido un comienzo. Doce votos, de entre un millar, fueron la diferencia entre ambos candidatos. Una exigua victoria de Rubalcaba que, además, le deja moralmente muy mermado, más aún cuando su victoria se ha fundamentado en el respaldo del aparato oficial del partido, la presión de los barones, con Felipe González a la cabeza y la inestimable colaboración del poderoso Grupo Prisa (“El País”, “Cadena SER”, “Canal+”…). Con semejantes premisas aún chocan más las absurdas palabras del barón Bono insistiendo en la obligación de “acatamiento” a la nueva dirección por parte de los vencidos. Y si faltaba algo para hacer el ridículo, el expresidente de la Cortes apuntillaba que es su deber democrático… Y digo yo… ¿Qué coño sabrá este tío de lo que es democracia?
Mejor borren mi última pregunta, no vaya el susodicho a querer contestarme y aún me cuente sus tremendas batallitas del pasado para justificar lo injustificable. A extrañas cosas le denominan algunos “democracia”, por eso nos gobierna hoy quien nos gobierna.
Bien haría el vencedor en incorporar al vencido en su equipo, pero el daño está ya hecho. Primero porque la masa social del PSOE, aún estando muy alejada de la realidad social que vivimos, ya no ve con tan buenos ojos a sus “santos barones”. Prueba de ello es lo ajustado del resultado. Y por otro lado está la realidad de las deudas morales con los poderosos que siguen asociadas a esas mismas viejas glorias y que con Rubalcaba en el timón seguirán siendo las losas que deberá arrastrar el partido y no podrán ser desprendidas.
No. Rubalcaba dice: “…unidad, unidad, unidad, unidad, unidad y renovación”, pero como puede haber renovación en esa unidad. Serán, sin duda, los miedos a los nuevos tiempos. Chacón mantuvo al PSC fuertemente ligado a al PSOE, pero su derrota puede dar alas a aquellos que pretenden independizar a los socialistas catalanes del viciado núcleo central. De hecho Ferraz nunca ha tenido demasiada estima por sus asociados catalanes, a pesar de que de ellos dependieron sus mejores momentos. Por su parte el PSC siempre ha sentido esos recelos muy amplificados por las bocas de algunos de sus barones, no en vano Alfonso Guerra, Rodríguez Ibarra y el propio Bono ya fueron declaradas personas “non grata” en diferentes sitios de Catalunya. La prueba del peligro que corre una escisión del PSC puede representarse en las palabras de Oriol Pujol animándoles a soltar amarras y unirse a CiU. Lo que pasa es que el catalanismo del PSC está mucho más a la izquierda que el PSOE, de lo contrario la opción que ofrece Pujol junior ya hubiese sido tomada hace mucho tiempo. Los socialistas catalanes tampoco se sienten independentistas aunque anhelan una España federal, sus deseos aún están lejanos de tendencias como la de ERC, pero de persistir esos desengaños que llegan de Madrid, tampoco dudo de que tarde o temprano esa opción no les parecerá tan mala. Después de todo es el camino que puede seguir toda la sociedad catalana.
Curioso que la derrota en el Congreso de Sevilla de uno de los miembros más españolistas del PSC pueda desembocar primero en la pérdida definitiva del control de esa región por Ferraz y después en la capacidad de alternancia política. En Sevilla no ganó Rubalcaba sino Rajoy. Por ello mi felicitación va hacia los barones que podrán seguir exprimiendo la poca leche que le queda a esa teta mientras embisten con su particular Titanic el Iceberg de la política española.

Imagen extraída de www.lavozlibre.com  

domingo, 5 de febrero de 2012

La verdad sobre el Plan Hidrológico Nacional



España, por sus peculiaridades geográficas, siempre ha tenido problemas que no podían solucionarse con las fórmulas habituales. Sin embargo, el importante retraso tecnológico y cultural del país obligó a tomar medidas siempre tarde y mal. La supervivencia y las ansias de enriquecimiento, que por lo general no acostumbran a respetar la legalidad y menos aún cualquier tipo de ética o moral, han llevado a soluciones locales muy poco adecuadas, pero que se han perpetuado a lo largo de los tiempos. La llegada de las diferentes propuestas democráticas a este país siempre ha chocado con estas inercias locales. Bajo este panorama no es extraño que en algunas zonas se mantengan extraños “protectorados” muy difíciles de entender en circunstancias normales. Está claro que en nuestros tiempos personas como Carlos Fabra (Castellón) son un perfecto anacronismo, pero también lo son las mafias y, sin embargo, cada vez tienen más influencia dentro de la sociedad moderna. La razón es el miedo que las sociedades locales tienen al cambio que les obliga a mutar sus modos de vida. En este punto, elementos que se opongan al avance de los necesarios cambios para la supervivencia, ya sea inventando aeropuertos o expulsando a quienes no respeten la “tradición”, encuentran su ubicación perfecta. Dentro de esas sociedades locales la gente piensa que la mafia, el capo o el cacique de turno, están defendiéndolos a ellos, pero la cruel realidad es que es justamente al revés.
Pero los caciques y las mafias no son nuestro tema de hoy, sino una de esos problemas que la orografía nacional ha agravado en los últimos doscientos años: el agua. Fue la Segunda República, cuando se planteó la necesaria y nunca llevada a cabo Reforma Agraria, la que se percató de que los recursos hídricos hacían inviables algunos proyectos ideados de esa reforma. Por eso, para poder emprender todos esos cambios de forma rápida y con garantías, antes hacía falta solucionar el problema del agua, fruto de esta necesidad nació el primer Plan Hidrológico Nacional (PHN). Aunque los estudios de este primer plan fueron muy elementales, contenían una cantidad enorme de cambios que, hasta cierto punto, eran necesarios aunque no se realizara la reforma que los impulso. Esta es la razón de que, veinte años después, Franco empezara un corolario de inauguraciones  de pantanos que le dieron fama. Algunos de ellos empezadas sus obras durante la Republica y abandonadas con la guerra, otros solo expresados en los papeles de la que fue la primera democracia verdadera de nuestro país. Entonces se dijo que todo era parte de un proyecto del último cuarto del siglo XIX, pero lo cierto es que por aquel entonces y durante de la creación de la confederación hidrográfica en 1926, se preocuparon más de la regulación legal de los usos del agua que las soluciones a las carencias de este recurso. De cualquier forma ninguno de esos proyectos necesitó de la aprobación popular y cualquier resistencia a cualquiera de esos proyectos fue meramente local y por parte de los afectados directamente.
Los primeros problemas graves llegaron cuando, en plena democracia, se retornó a la conciencia política de recobrar un nuevo PHN, pero adaptado a los nuevos tiempos y nuevas necesidades, pero impulsado por una sequía severa que había asolado nuestro país en los últimos años antes de 1992. Aquel  nuevo Primer Plan Hidrológico Nacional (así resulta para algunos) estaba orientado exclusivamente a llevar agua de las cuencas norte hacia las cuencas sur, agotadas en la práctica la mayoría de alternativas útiles de pantanos. Con todo, desde aquel momento la cuenca más problemática fue la del Segura que, contranatura, era capaz de agotar ingentes cantidades de recursos hídricos. La filosofía del trasvase generó grandes problemas ecológicos en todas las cuencas donantes, así que bien pronto los grupos ecologistas se pusieron a analizar el problema a fondo. Por otro lado, grupos con intereses económicos en el problema, hicieron sus estudios paralelos que, a menudo,  tenían muy poco de científicos. Los estudios serios, dada la problemática que suponía quitar el agua de un sitio para trasladarla a otro, pusieron su interés en el uso del agua en los lugares de destino, lo que, por comparación también lo hizo en los puntos de origen. Esto chocaba con las normas establecidas en 1926 con la creación de la confederación hidrográfica, porque demostraba que, mientras la vigilancia en cuencas como la del Ebro era realmente severa con sus posibles usuarios, la cuenca del Segura, y en general todas las pequeñas cuencas levantinas, eran un autentico desmadre. Al parecer todas ellas habían quedado bajo el control final de esas extrañas figuras de las que hablamos al principio, permitiendo auténticas barbaridades con el uso del agua. Por supuesto Murcia se convirtió en el centro del huracán. Finalmente el PNH, después de la polémica generada por el funcionamiento del trasvase Tajo-Segura (proyecto de 1933, iniciado en 1966 y finalizado en 1979) que con la sequía dejaba un enorme rastro de peces muertos en todas aquellas cuencas que cedían su preciado líquido, se centró en problemas más genéricos aparcando sus obras más polémicas una y otra vez.

Fue la llegada del PP al poder, en 1996, quien abrió la caja de Pandora intentando resucitar el demagógico trasvase del Ebro. Las razones que hasta entonces habían apartado a este transvase de la lista de posibles fue el inevitable daño ecológico que supondría para el Parque Natural del Delta del Ebro (muchas veces propuesto para Parque Nacional con todas las leyes de protección que eso hubiese supuesto).  Claro que, si nos fijamos en las razones reales para este trasvase ya podremos suponer que les importaba muy poco los daños ecológicos que pudieran causar. Después de todo hoy vivimos la máxima severidad de la crisis por culpa de aquellos principios. De todas formas tampoco eran meramente ecológicas las razones que inviabilizaban ese transvase, había otras dos: la primera era de justicia, pero la segunda era de Seguridad Nacional.
Cuando, el ahora de nuevo ministro de agricultura, pesca y medio ambiente, ya decidió pasarse por el arco de triunfo, los razonamientos ecológicos también quiso quitarle el poder  a las autoridades de la cuenca hidrográfica que, durante décadas habían impedido a los agricultores de la zona la realización de sobreesfuerzos hídricos de forma severa y contundente. Incluso se había bloqueado un proyecto para hacer del desierto de los Monegros un área cultivable. Así, de un plumazo, el controvertido ministro se saltaba las cuestiones legales y se saltaba los derechos de doce millones de españoles.
La segunda razón simplemente se negó. Que dos centrales nucleares dependieran del flujo incesante de agua en esta cuenca para refrigerarse, no suponía una realidad para el decidido proyecto del ministro.
Pero qué impulsa hoy con tanta fuerza esa locura. Entonces fue la idea de vender otras locuras como Marina D’or en Castellón, o las imposibles urbanizaciones ligadas a campos de Golf en Murcia. Fracasado el proyecto de Castellón y derribada por la crisis la demanda de propiedades en Murcia, todo el mundo ve claro que la idea de montar potabilizadoras de agua de mar parece una solución más que suficiente para las necesidades lógicas del Levante español.  Pero para el PP y Arias Cañete no es suficiente, ¿por qué?


Las razones son nuevamente dos. En primer lugar está la asignación de unas grandes obras, que tardarían muchos años, a posibles empresas amigas siguiendo la tradición nacional de la que hablamos al principio. A segunda está en un extraño desarrollo agrícola que se ha dado en la provincia de Murcia en los últimos 40 años. Mientras, en 1970, la famosa “Huerta de Murcia” cubría un área muy limitada en torno a la capital provincial, y ya exprimía casi totalmente el caudal del río Segura, dejando muy poco agua a su desembocadura en la provincia de Alicante, hoy ocupa un área más de diez veces mayor, cubriendo la casi totalidad del Campo de Cartagena y los valles de Mazarrón y Totana. De hecho se habla de regadíos en la misma Lorca. Con todo, lo más hiriente es el uso del agua en el noreste del Campo de Cartagena donde se practica el llamado riego a manta o por saturación del suelo, que supone un consumo desproporcionado de este recurso. Este punto siempre se ha negado, pero los tipos de cultivos hortícolas y las imágenes por satélite no ofrecen ninguna duda. Es fácil contar más de 10 balsas mucho mayores que una piscina olímpica en un área de unos 3 kilómetros cuadrados.

Pero… ¿de dónde sale esta agua ahora que aún no está hecho el trasvase? La principal fuente es el subsuelo. De hecho esta provincia, como su vecina Almería, era muy rica en aguas subterráneas, pero a demasiada profundidad como para aprovecharse en el pasado. Sin embargo en cuanto se pudieron extraer se hizo ilegalmente y sin ningún control y hoy los acuíferos muestran una elevada salinización ya que por su sobrexplotación están siendo invadidos por agua de mar, así que su utilización está en el límite temporal antes de que sean totalmente inservibles. Agotado este recurso que ha enriquecido solo a unos pocos y ha hecho dependientes al resto, hay que buscar con urgencia nuevos recursos hídricos, de ahí que, por subsistencia, para lograrlos no se respeten los derechos ni las necesidades de los demás… menos aún sus sentimientos.
Se puede entender a los murcianos, máximos impulsores del proyecto de trasvase del Ebro, aunque es obvio que no es de justicia, pero qué interés mueve al ministro Miguel Arias Cañete.
Para más información sobre este tema:
-Información ofrecida por la Universidad de Valencia: http://www.uv.es/choliz/indicetrasvase.htm
-Información de la Universidad de Barcelona: http://www.ub.edu/geocrit/arac-69.htm

Las imágenes de este artículo han sido confeccionadas a partir de Google Maps salvo el mapa del Trasvase Tajo-Segura y la foto del ministro Cañete que han sido tomados de la Wikipedia.

martes, 17 de enero de 2012

La nueva responsabilidad del PP



Hemos dejado pasar la primera andanada informativa tras la muerte del fundador del PP (antes AP) para empezar a  evaluar las implicaciones y las obligaciones que vienen añadidas a este evento. Una vez muerto el que dirigió los destinos de la derecha española, marcó el camino de lo que tenía que ser y no ser el conservadurismo y dinamitó de la forma que pudo todos los proyectos de progreso democrático en nuestro país, el PP tiene ahora una serie de compromisos y obligaciones hacia el Estado y la sociedad española que deben ser ineludibles.
En primer lugar ha llegado el momento de acabar con el franquismo residual que ha impedido durante más de treinta años cerrar el proceso transicional. Para ello el PP debe definir cuál es su concepto conservador para medirse con los partidos de ese ámbito que hay en toda Europa. En su día Don Manuel aglutinó bajo sus siglas todas las tendencias de la derecha; desde las más livianas a las más ultras, siendo tolerantes con las posturas franquistas y sustentando las teorías que, en oposición a la realidad, daban validez a esa dictadura y negaban su naturaleza terrorista. Es hora también de que los muertos descansen en las tumbas, igual que ya lo hace Don Manuel, y recuperemos esa memoria histórica que se amontona en las cunetas de nuestro vergonzante pasado.
Sé que el tema del perdón implícito a nuestra tutelada democracia, es un dogma de fe para las estructuras del PP, pero eso, en contra de lo que creía su fundador, no es un impedimento para firmar una paz para todos.
Cierto es que fueron muchos los que colaboraron con aquella caza de brujas continuada que fue el franquismo y que por responsabilidad no deberían volver al ejercicio del poder, por eso la responsabilidad del PP aún es mayor para con todos los españoles. Después de todo son muchos los miembros de su partido que, durante años, ajenos al dolor que producían, se han permitido hacer apología de ese régimen dictatorial de un modo que, en otros países más civilizados, les hubiese supuesto responsabilidades penales graves.
De Rajoy es ahora la palabra y no debe escudarse ni en el poder ni en la crisis para responder a la gran pregunta: ¿Van a poder descansar los fantasmas del pasado o tendremos que seguir viviendo con ellos?
Pero debe pensarlo rápido y bien porque los nuevos tiempos ya están aquí, España se lo va a exigir y 11 millones de hooligans y la mayoría absoluta de unas elecciones cuestionables, no son suficientes para controlar a un país que ha perdido la fe en los políticos que exigen sacrificios al pueblo y son incapaces de predicar con el ejemplo. La representatividad de quien gobierna debe estar fuera de toda duda, pero el don de Mariano aún se escribe con minúscula.

Imagen extraída de www.vigoalminuto.com

lunes, 16 de enero de 2012

Españoles, Fraga... ha muerto... ¡BUAAAA!



Las necrológicas se llenan hoy de “ha muerto Manuel Fraga Iribarne” y, como buenas maestras del su significación, hacen para el finado una buena elección de elogios que llevarse a la tumba. Casi se diría que los eligen al peso emulando esos puñados de tierra bendecida que se echan sobre el féretro una vez ha bajado a la fosa de los enterramientos en el suelo. Las buenas palabras son todo un rito llevado a cabo más para ahuyentar los miedos a ese casi tabú que es la muerte, que como una sincera fórmula de recordar al desaparecido y consolar a sus seres queridos.
Don Manuel no fue diferente en ese aspecto y tuvo cosas buenas y cosas malas, aunque estas últimas fueron de las que dejan cicatrices en el alma e incluso en los cuerpos. No en vano Fraga fue llamado la mano izquierda de Franco y, en su papel de franquista firmo las sentencias a muerte de muchos conciudadanos. Mientras otros respiraban bajo la sombra del dictador, él salió al extranjero donde destacó en sus estudios, pero nada de los aires que vivían aquellos pueblos quiso para el suyo. Aquí se limitó a ser el peso muerto que la nueva democracia debía arrastrar del franquismo, el símbolo de que el Caudillo lo dejó “todo atado y bien atado”. Aún así le llamaron “Padre de la Constitución” cuando solo fue el muro de contención que evito que aquel papel mojado que nos regalaron en 1978 como Carta Magna, llevara escritas las palabras que pudieran darnos una plena democracia.
Hoy la prensa escrita va llena de frases y palabras que van del elogio a la tolerancia por una figura política que ha muerto. Yo solo espero que no queden muchos como él si es que queremos tener esperanza.
¡Descanse en paz!

NOTA FINAL: Lo peor no es lo que digo, sino lo que cayo.

Imagen extraída de www.desmotivaciones.es

sábado, 14 de enero de 2012

Estadios míticos del fútbol: los tres grandes.



El fútbol es un deporte de masas, aunque, tal vez, deberíamos decir espectáculo. Las jugadas más plásticas, el fútbol de ataque y creativo son los mayores atractivos. Pero saber de fútbol no se limita a las tácticas o a los jugadores. De hecho, muchas veces, lo que levanta más pasiones de este gran espectáculo no es lo que sucede en ese rectángulo de variadas dimensiones. Las aficiones, los estadios, la historia, la épica, la diversión… hay muchísimas variables que pueden decir algo más de lo que es el fútbol. Por supuesto, para los jugadores, no es lo mismo jugar en lugar que otro. Así, a lo largo y ancho del planeta, hay toda una serie de “Estadios” que deben escribirse con mayúsculas porque los jugadores foráneos que tienen la suerte de jugar allí los recordarán para siempre.
A continuación daremos una lista y algo de su significado para este mundillo del fútbol.
Para empezar hay tres viejos estadios que todo el mundo conoce: Maracaná (Río de Janeiro – Brasil), Azteca (Ciudad de México – México) y Nou Camp (Barcelona – España). Los tres, en sus mejores momentos tenían aforos superiores a los 100.000 espectadores, pero la incorporación de nuevas medidas de seguridad redujo aquellas cifras.
El estadio brasileño se erigió con vistas al mundial de 1950 y allí se jugó la final del llamado maracanazo, porque Uruguay derrotó a la anfitriona por 2 a 1. Se afirma que asistieron 210.000 aficionados. La cifra choca con el actual aforo de 92.000, eso sí, todos sentados; o los 103.000 tras la reforma de 1999, con 77.000 asientos. En 2014 volverá a ser sede de la final de otro Mundial.
Azteca es de los tres el único que aún supera las cinco cifras de espectadores, concretamente 105.064. Es propiedad de Televisa y son varios los clubs que en diferentes épocas han disfrutado de él como local, y en ocasiones al mismo tiempo: Nexaca, Atlante, Atlético Español, Cruz Azul y en la actualidad el América de México.
Azteca, inaugurado en 1966, ya ha vivido dos finales Mundiales: en 1970, que consagró a Brasil, y 1986, en que México celebró este evento ante la renuncia de Colombia, y consagró a la Argentina de “la mano de Dios”. Pero el momento estelar de este estadio fue la semifinal entre Italia y Alemania de 70, el llamado “partido del siglo XX”. Italia ganó agónicamente por 4 a 3, pero gran figura fue el alemán Libuda, conocido por “el rubio de oro”. Este teutón estaba llamado a pasar a la gloria de este deporte de no ser por formar parte de un arreglo de partidos al año siguiente que acabó con su expulsión de la Bundesliga. En 1996, con 52 años, murió de una apoplejía, solo y en la miseria. Permitidme que me extienda un poco más en este punto pues desde aquí me gustaría hacer, con estas líneas, un pequeño homenaje al que también fue llamado también el “Garrincha alemán”: Reinhard “Stan” Libuda.
Finalmente acabaremos con el tercero de los grandes estadios míticos, el Nou Camp o Camp Nou según quién o cuándo lo diga. Aunque su nombre oficial, para que quede claro, es el segundo: Camp Nou. Su actual aforo es de 99.354 espectadores, pero desde su inauguración en 1957 ha sufrido muchas remodelaciones que han aumentado y disminuido mucho su capacidad. El máximo lo alcanzó durante el Mundial de 1982 con 120.000 espectadores. A pesar de ese aforo es el único de los tres Estadios que no ha vivido una final de un Mundial, ya que la final del 82 se jugó en el Santiago Bernabeu.
El dueño de este estadio es el F.C. Barcelona que, casualmente, es el único club de Europa que desde 1955 ha jugado todos los años alguna competición oficial de ámbito continental. Eso unido a que es el estadio de mayor aforo de esas competiciones, lo convierten en el Estadio mítico con que todo jugador europeo sueña.
Todos los campos tienen su momento histórico, pero este Estadio, como consecuencia de estar viviendo la explosión de un proyecto futbolístico nacido en “La Masía” está renovando esos  grandes instantes cada día. En la actualidad ha nacido un nuevo turismo futbolístico en que personas de todos los continentes vienen a pasar unos días a la ciudad Condal con entradas incluidas para este Estadio donde disfrutar de un futbol de fantasía con el Barça. No en vano algunos de esos viajes están empaquetados bajo el nombre de “Dream Maker Stadium”.

Imagen tomada de www.diariorural.com

martes, 10 de enero de 2012

El posible Nobel de la Paz a Otegui desata una tormenta en Twitter



Se ha desatado una tormenta en twitter porque se ha divulgado que la izquierda abertzale ha propuesto a Otegui para el Nobel de la Paz. Hay que decir, no obstante, que quienes han puesto el grito en el cielo han sido el facherío nacional y la España Cañí. La propuesta viene de mucho más lejos de lo que algunos se piensan. Concretamente de las profundidades del imperio británico. Pero es que allende los mares saben que el señor Arnaldo lleva trabajando para que ETA abandone las armas desde hace más de cinco años. Son muchos en el mundo abertzale que piensan, desde comienzos de los noventa, que la lucha armada había perdido su sentido, pero la fuerza que los más violentos ejercían sobre los demás y, sobre todo, lo inapropiado del tema GAL, hicieron imposible un mejor desenlace antes de hoy.
Una prueba de cómo habían cambiado las cosas pudo ser el, creo que falso, atentado a Aznar que algunos miembros de la banda pudieron, tal vez haber pactado con el aparato publicitario del que después sería el presidente, y que tuvo una víctima inocente como daño colateral. Era obvio que los terroristas conocían el blindaje del vehículo del entonces candidato del PP, la cantidad de explosivos utilizados era claramente insuficiente para dañarlo, sin embargo, la deflagración hacia fuera no era tan controlable y generó víctimas inocentes. Es posible que no existan más pruebas y que sean achacables a la chapucería de la banda, pero las acciones al respecto de don José María durante su presidencia, incluida su lapidaria denominación de la banda, no me dejan ninguna duda. Por lo menos al resto del mundo si tendrían que generarle unas pocas… de dudas, digo.
Paro la acción que más me llamó la atención y más me repugnó, fue el cambio de denominación del CSI por CNI. Con este cambio el servicio de inteligencia nacional no solo alteraba su nombre, sino también servicio a la nación por un servicio al gobierno, algo intolerable para un país que se llama democrático. De un plumazo había desaparecido aquel resorte que permitía al CSI vigilar al gobierno para evitar que se propasara. Al mismo tiempo el gobierno, como si de un cuerpo policial más se tratara, dictaba las prioridades de investigación. Fruto de este cambio los especialistas se centraron en la kale borroka, pero dejaron de lado el terrorismo internacional, a pesar de que los caprichos bélicos del gobierno del PP nos habían puesto en el objetivo del islamismo. Doscientas víctimas inocentes, de todas formas, no les hubieran descabalgado del poder de no haberse empecinado en culpar a ETA de lo que el “modus operandi”, la situación de la banda y, sobretodo, las tempranas palabras de Arnaldo Otegui desmentían ¿Cuándo ETA había desaprovechado la oportunidad de apuntarse un tanto brutal? Pero por aquel entonces ETA ya no se podía permitir acciones que no se dirigieran directamente a los núcleos del poder. Tiempo atrás los atentados de Hipercor y el concejal Blanco habían desconectado a la banda del mundo aberzale. Una cosa era la lucha armada por la independencia de Euzkadi y otro el exterminio de inocentes. ETA había perdido el rumbo y el sentido, y ni la llegada de las derechas al poder podía enardecer a lo que un día fueron sus bases. Posiblemente aún habría personas que enarbolarían las fotos de etarras como si fueran héroes, pero para la mayoría eran unos mafiosos que habían puesto a los verdaderos independentistas en el disparadero.
En estas salsas, y con el PSOE ya en el poder, en 2006 ETA anuncia una tregua permanente. Desgraciadamente aquellos que eran herederos de un terrorismo aún más brutal como fue el régimen franquista, se empeñaron en poner el máximo de palos a las ruedas de la paz (los mismos que hoy claman al cielo ante el posible Nobel de Otegui). Con todo, creo sinceramente que la tregua tampoco se hubiese podido mantener mucho tiempo. El núcleo violento de la banda seguía muy vivo y, aunque ya eran muchos los que hablaban de paz, los más duros dieron un golpe de mano dentro de ETA representado por el atentado de la T4. La enorme cantidad de explosivos utilizados en aquella acción hacían prever una orgía de sangre en los siguientes meses, pero en lugar de eso se mostraban sus grandes carencias. Entre tanto Otegui ya había cambiado su lenguaje, todo y que se notaba que ETA mandaba sobre el discurso político (algo que se hubiese podido evitar de no haber ilegalizado a Batasuna en 2003), las palabras del líder habían perdido su agresividad. De hecho se notó que la banda había intentado puentear al propio Otegui frente a los medio, pero estaba claro que la voz entre líneas del batasuno era también la que los abertzales no podían transmitir más allá de los filtros etarras.
Así que a pesar de su encarcelamiento, de la ilegalización de Batasuna y de la mordaza ejercida por los violentos, Otegui logro colar, en nombre de la mayoría de los abertzales, un mensaje de Paz. Creo que es algo mucho más meritorio que las acciones de Juan Carlos para traer esta “democracia” tutelada tras tomar el testigo de Franco y, sin embargo, también fue nominado al Nobel. Nadie, desde la racionalidad, puede culpar a Otegui de las 829 víctimas de ETA (tampoco a Juan Carlos se le puede culpar del millón de muertes del franquismo, muchos miles después de la guerra). Pero es que hay un número enorme de Nobeles de la Paz que sí son directos responsables de muchas muertes e incluso auténticos genocidios.
Pues con la tormenta “Otegui al Nobel de la Paz” descubrimos que la información ha sido filtrada a través del PP después que el CNI (ya sabemos que nueva forma antidemocrática de funcionar tiene) se la entregara al mismísimo señor Rajoy ¿Qué perversa intencionalidad tiene todo esto en manos de un partido que siempre ha sacado partido del tema ETA?

La imagen es una captura de la web del diario QUÉ!

sábado, 31 de diciembre de 2011

Cuento de nochevieja: el pisito.



El matrimonio Pérez no paraba de gritarse. Los niños asustados permanecían con los ojos muy abiertos en el sofá. No se atrevían a levantarse para acercarse a sus juguetes. Sus padres jamás les habrían tocado, pero era imposible eliminar la creencia de que si permanecían muy quietos y portándose bien, aquello pasaría y sus padres volverían a quererse como meses atrás.
Serafín y Elvira nunca habían dejado de quererse, pero no estaban preparados para asumir que su vida se había ido a la mierda. Que sus años de grandes beneficios acabaron repentinamente unos meses antes y aquel pisito que les obligaba su nuevo estatus era ahora una pesa que les hundía en el lago de la desesperanza. Cuando vieron a sus hijos con los ojos abiertos por el miedo, sentados en aquel sofá de diseño, volvieron a la realidad. Primero fue Elvira que se clavó en mitad de una de sus frases de reproche. Después fue Serafín quien se atragantó con tanto sufrimiento. Por un momento volvieron las necesidades de esperanza del pasado y los brazos de él juntaron con cariño a toda su familia.
-¿Y si resistimos?
Los niños se levantaron al unísono, agarrándose a esa gota de unidad, y gritando “sí” en total algarabía. Lo necesitaban. Todos los necesitaban. Elvira miró a Serafín. Sabía que no podrían resistir. Ambos lo sabían, pero por esos niños tendrían que hacerlo. Con lágrimas en los ojos ambos sonrieron. Tenían veinticuatro horas antes de que se ejecutara la hipoteca y tuvieran que irse a comer las uvas debajo de un puente.
-¿Cuánto dinero nos queda? –Pregunto Serafín pensativo-.
Juntaron hasta la última moneda y Elvira salió con Raquel, la hija mayor, de solo once años, para comprar suministros. Entre tanto Serafín, con la relativa colaboración de Javi y Edu, los dos pequeños, lavó todas las botellas y envases con tapa que encontró, y los lavó y rellenó de agua. Se preparaban para una resistencia numantina.
Elvira y Raquel tuvieron que recorrer seis manzanas para llegar a uno de esos supermercados con productos en oferta. Tenían que buscar productos básicos, de larga duración y que no necesitaran conservación frigorífica ni demasiada elaboración. Era de esperar que les cortaran todos los suministros para forzarlos a salir. Aquella compra necesitaba de una enorme atención, sobre todo cuando el presupuesto era tan limitado. Tal vez por ello no se percataron de que les observaban.
Ya en la caja, mientras Elvira pagaba y Raquel llenaba el carro de la compra que habían traído, se acercó a la niña un jovenzuelo barbudo que interrogó a la pequeña. Cuando Elvira miró el joven se marchó, pero se percató de que la pequeña Raquel estaba a punto de llorar.
-¿Te ha hecho algo ese desarrapado?
No tuvo tiempo de esperar una respuesta porque la cajera le estaba llamando la atención.
-Señora, que faltan sesenta y dos céntimos.
Elvira estaba muy nerviosa mientras manoseaba su monedero vacío.
-Tenga, cóbrese.
La joven que había alargado aquel euro a la cajera no tenía mejor aspecto que el desaliñado barbudo que hablaba con Raquel, pero la sonrisa con que la miraba y, sobretodo, el euro que la cajera ya tenía en sus manos, garantizaban que no quería hacerles ningún daño.
Cuando Elvira y Raquel llegaron a casa sorprendieron a Serafín y los niños con una oleada de necesario optimismo. Aquel día, mientras se preparaban para el mañana más oscuro, ya no hubo más reproches.

El día treinta y uno de diciembre amaneció plomizo, con aquella pesadez tan típica de los días de frío invernal. Serafín, que llevaba levantado desde mucho antes de que la primera luz natural fuera capaz de adivinarse entre la capa de nubes, había puesto la calefacción a tope. “Aprovecharemos mientras aún hay suministro de gas”, pensó. Elvira se levantó con las primeras luces y a los niños los despertó a las nueve y con el desayuno ya puesto en la mesa del comedor. En todo ese tiempo no habían tenido noticias de los juzgados, pero sabían que la ejecución de su hipoteca sería inminente.
Para quien aún no lo sepa, la ejecución de una hipoteca quiere decir dejar a toda una familia, con padre, madre, niños y en ocasiones hasta ancianos, sin un techo porque el banco, que un día les concedió un préstamo, ahora, al llevar varias mensualidades sin cobrar (menos de las que se puedan imaginar) lo expulsa judicialmente del piso. En un país tan capitalista como Estados Unidos, eso significaría que, aunque la familia se quedaría sin un sitio para vivir, la deuda quedaría saldada, pero en España no. En el año 2002 Serafín y Elvira pidieron un préstamo de treinta millones de pesetas  (unos 180.000 euros) para comprar este piso de cuarenta y al que los servicios del banco tasaron en cuarenta y cinco. Para la obtención del préstamo los padres de ambos tuvieron que avalarles. Hoy les embargarán, constando que el piso solo vale 100.000 euros que se restarán del capital pendiente, pero Serafín y Elvira, ya sin techo, aún deberán al banco lo que resta del capital más los intereses adeudados, más los intereses creados por impago de la deuda. En total aún deberán casi otros 100.000 euros. Como el banco pretenderá cobrar de inmediato, a continuación procederá a solicitar la deuda a los avalistas que, como seguramente viven en pisos antiguos, podrá embargar impunemente. Al  final puede darse el caso de que siga existiendo una deuda pendiente tras dejar en la calle a tres familias y haber embargado por un montante original de 150 millones de pesetas del año 2002, más 80.000 euros en cuotas, por lo que solo fue un préstamo de 180.000 euros. Y en todo este proceso el banco aún manifestará haber perdido dinero.
Bueno, eso es lo que en esencia se denomina ejecutar una hipoteca. El proceso concluye cuando un juez, acompañado de miembros del orden público, expulsan a los habitantes de un domicilio y sellan este declarándolo propiedad de la entidad bancaria demandante. Es exactamente, pues, lo mismo que desahucio, lo que pasa es que cuando el ministro de economía dice en la tele que en España se ha llevado a cabo ese mes 10.000 ejecuciones de hipoteca, cuesta imaginarse a 10.000 familias, unas cuarenta mil personas (muchas más de las que caben en la mayoría de campos de fútbol de primera división) vagando sin un  techo que les cubra. Si en lugar de ejecución de hipoteca usara los términos embargo o desahucio, no sé si tendríamos esa imagen, pero seguro que nos acercaríamos más a ella. Los eufemismos son muy útiles para no crear alarma más allá de donde conviene. Y ahora y siempre, e nuestro país, no conviene que los bancos pierdan dinero, pues estos financian a los partidos políticos y no hay que dar lugar a la ejecución de esos préstamos. Si alguna vez quieren saber qué partidos se deben a esos préstamos solo se han de fijar en la cantidad de publicidad que unos y otros tienen en los medios. Al final ya se puede ver quién paga.
Para ejecutar cualquier hipoteca hace falta la actuación de un juez. Su señoría debe desplazarse al domicilio y pedir a los ocupantes que lo desalojen, como es sabido que hay la fea costumbre de no querer abandona el hogar de buen grado, ese juez se rodea de varios números de la policía judicial. En Catalunya, donde viven Serafín y Elvira, esa policía son los Mossos d’Esquadra, en el país vasco la Ertzaina y en el resto de España es la Policía Nacional. Sin embargo, es posible que en algunas poblaciones, para evitar aglomeraciones en el entorno, sean acompañados por la Guardia Urbana.
En el estado de Nueva York, en el lejano país capitalista de los Estados Unidos de América, existen dos jueces (seguramente son más) que tienen muy claro que lo más sagrado que existe para una familia es su vivienda. Por eso cuando un banco les demanda la ejecución de cualquier hipoteca, buscan el más mínimo término de ambigüedad o falta de claridad para rechazar la petición. Y eso en un país en que, como hemos visto, existe la “dación en pago”.  De este modo las ejecuciones de hipotecas se reducen mucho en aquel estado y hacen que las entidades bancarias sean un poco más responsables a la hora de expulsar familias de sus domicilios. Curiosamente en nuestro país, donde las familias están mucho más desvalidas frente a los gigantes bancarios, los jueces han creado procedimientos para abreviar el proceso de las ejecuciones hipotecarias. Es decir, al contrario de lo que sucede en EE.UU. aquí los jueces están claramente del lado del más fuerte, exactamente igual que los políticos.
Visto esto no es muy probable que en nuestro país se apruebe una medida tan racional como la dación en pago. La pérdida de valor de las propiedades inmobiliarias es algo que debe asumir totalmente el adquiridor. De nada valió que el día que se tuvo que pedir la hipoteca el banco le obligara a pagar los gastos de un tasador. Un tasador que dio un valor a la propiedad, como mínimo, un 20% por encima del valor del préstamo, pues así estaba establecido por ley. Claro, que algunas entidades bancarias, presuponiendo que el valor de las propiedades no bajaría, daban el 100%, e incluso más para que el cliente adquiriera un coche, amueblara el piso e hiciera el viaje de novios a cargo de la hipoteca. Todo eso se suponía que el banco lo asumía por el valor del piso y la incontable cantidad de gastos inventados que cobraba alrededor de esa hipoteca. Pero no, el banco estaba pensando en otra cosa: en la impunidad que legalmente tiene establecida y en la posibilidad de seguir cobrando aún después de haber dejado al cliente sin nada. Es curioso que, sin embargo, en el más que hipotético caso de quiebra de una entidad bancaria, sus dueños o ejecutivos, no te devolverían ni un euro de cuanto tuvieses allí ingresado. Como mucho el fondo de compensación del Banco de España te devolvería, hasta un máximo de 18.000 euros por cuenta de lo que tuvieras allí ingresado. El resto lo perderías. “Afortunadamente” está claro que no va a quebrar ninguna entidad bancaria, por lo menos mientras existan familias a las que ejecutarles hipotecas.

Sobre las diez y media un coche de la guardia urbana paro frente a la portería donde vivían los Pérez. Serafín no perdía detalle y vio como tres agentes se bajaron del vehículo. Uno se situó en la escalera y los otros se desplazaron hacia las dos esquinas de la manzana. El coche se colocó en doble fila unos metros más allá. Diez minutos después llegó un coche de los Mossos d’Esquadra que se quedó a la espera al otro lado de la calle. Serafín sabía que de un momento a otro llegaría el juez. Elvira había preparado varias bolsas para llevarse todo lo que pudieran y lloraba en silencio aferrada a sus niños, todos muy quietos, en el sofá. Entre tanto, Serafín temblaba de ansiedad mirando desde la terraza como se preparaba su Fin de Año. Pero, cuando todo parecía perdido, un grupo de unas cuarenta personas, con una pancarta a la cabeza, llegó corriendo hasta la escalera.
-¡Banqueros ladrones!... ¡No más desahucios!... ¡Familias en la calle, quiebra social!... ¡Jueces o verdugos!
Los gritos eran muchos y muy variados, pero ante todo eran un enfrentamiento a aquel absurdo proceder de la banca, la justicia y el Estado. ¿De qué sirve un Estado que no está al servicio de sus ciudadanos?
Lentamente, como si a cámara lenta se tratara, el vehículo del juez, rodeado por otros dos de los Mossos d’Escuadra, llegó a las proximidades del edificio. En ese momento un grupo de unos cuarenta jubilados del casal de dos manzanas más arriba, se unió a la cuarentena de personas, mayoritariamente jóvenes del movimiento 15M, que ya estaban bloqueando el paso al juez. Este, por cierto, ni siquiera había hecho ademán de salir del coche. Así se mantuvo todo hasta poco antes del mediodía cuando llegaron dos furgonetas de antidisturbios. Enseguida salieron e intentaron crear un pasillo para que pasara el juez.
-No, no, no nos moverán… -cantaban los más viejos-.
Cuando parecía que se lograba abrir ese pasillo, de no se sabe bien donde, aparecieron otro medio centenar de manifestantes que colapsaron ese pasillo. Entonces los Mossos intentaron cargar contra el tumulto, pero su falta de mesura acabo con dos números cayendo encima del juez que se lesionó el pie. Los antidisturbios aún intentaron dos ataques contra los manifestantes en que lesionaron a varios individuos, entre ellos dos ancianos, pero todo había acabado. Minutos después cuatro ambulancias se llevaron a los heridos, entre ellos el juez. Al final ninguno de los lesionados lo fue de gravedad y unas horas después ya estaban en la calle. Incluido el juez que volvió a su casa con un vendaje compresivo para su esguince de tobillo de grado 2.
Aquella noche una veintena de jóvenes celebraron el nuevo año en casa de los Pérez que, por fin, entendieron el significado del 15M.
Poco después de las doce campanadas Serafín recibió una llamada en que un particular se hacía cargo de la deuda del piso con el compromiso de cedérselo por un alquiles asequible durante los próximos cuatro años. Perderían el piso, pero tendrían un techo y ya no deberían nada al banco. Empezaba bien el año. Posiblemente serían más pobres, pero también más felices. Si las cosas marcharían mejor o peor solo el futuro lo diría, pero volvían a ser sus propios amos.

¡Feliz Año Nuevo!

Imagen tomada de www.eturismoviajes.com

miércoles, 28 de diciembre de 2011

Quieren descolgar la camiseta de Urdangarin del Palau



Iñaki Urdargarin fue un magnífico jugador de balonmano que formó parte de un equipo irrepetible que marcó toda una década del balonmano europeo; la de los noventa. Fruto de aquella etapa triunfal, varias camisetas de jugadores de balonmano restan colgadas en el cielo del Palau. Entre estas, cómo no, la del yerno real.
Yo recuerdo al Iñaki jugador de balonmano y en un momento en que este deporte era muy comentado en la ciudad Condal. Era un jugador querido, pero con el paso del tiempo son muchos los que creen que su camiseta llegó a lo alto del Palau Blaugrana más por su notable casamiento que por el cariño que le profesaba la afición del club.
Visto desde una perspectiva de favoritismo Real, es lógico que ahora muchos insistan en que, si Iñaki es procesado y hallado culpable, su camiseta debe descolgarse de cielo del Palau. Sin embargo, desde mi punto de vista, creo que se han de separar las imágenes del Iñaki jugador, Iñaki yerno del Rey y el Iñaki negociante fraudulento. Yo vi los tiempos gloriosos de aquel Barça y creo que la camiseta solo pertenece a aquel jugador que se retiró en el año 2000 porque ya no podía seguir el ritmo que obligaba el profesionalismo en blaugrana, y el Iñaki que vino después, y que posiblemente ya existía fuera de la pista, era otra persona que poco o nada debe importarnos a los aficionados.
Tal y como yo lo veo, solo puede existir una razón para descolgar esa camiseta: el ejemplo a los jóvenes. Porque todos los deportistas de élite terminan siendo un ejemplo en todos los ámbitos para la juventud. Pero si eso es así, creo que tendríamos que ser mucho más exigentes con personas que acostumbran o acostumbraron a cometer errores como Mourinho, Stochkov, Cristiano Ronaldo, Pepe, Dani Alves, Di María, Marcelo, De Jonk, Rossi (el de los años 80), Pippen, Simoncelli (Q.E.P.D.), Shumacher, Maradona, Ferrer…  Y la mayoría de ellos cometieron sus errores en la cancha, Iñaki solo lo ha hecho fuera.
Si aún tienen dudas les invito a ir al Palau y buscar una corona en la camiseta.

Imagen extraída de http://paraelqueloquieraleer.blogspot.com    


viernes, 23 de diciembre de 2011

Errores de concepto en la arquitectura del poder


El poder no puede ni debe centralizarse, de lo contrario se vuelve injusto e ineficaz. Tenemos ahora un brillante ejemplo en la suspensión de acuerdos de pesca con Marruecos por parte de la UE. Eso lo están sufriendo en sus carnes los pescadores de la provincia de Cádiz, en especial los de Barbate. No sé si Europa preguntó a España antes de votar esta medida, pero lo que es seguro es que no preguntó a la Junta de Andalucía que era el poder político responsable más próximo a las consecuencias. Lo que está claro es que toda medida política que se toma beneficia a unos y perjudica a otros y un poder justo debe saber compensar a los perjudicados y procurar que los beneficiados no sean siempre los mismos. O se gobierna para todos o no se es un verdadero gobierno para nadie, solo un simple títere llevado por remotos prejuicios. Eso mismo sirve para el Gobierno Nacional, e incluso por los Autonómicos que deberían consultar con los Municipales y estos a la mismísima ciudadanía. Solo estructurando así los poderes podemos estar seguros de ejercer el buen gobierno.
Por otra parte hemos creado cámaras e instituciones que producen muchos gastos y muy pocas soluciones. El primer caso, en nuestro país, es el Senado. Una cámara a la que se le ha quitado  las pocas atribuciones para las que fue creada. Su amputación del sistema político actual, lejos de crear un vacio en las relaciones institucionales, lo único que produciría es un ahorro económico importante. La otra institución absurda son las Diputaciones Provinciales. Es cierto que los municipios pequeños encuentran en esta institución un sustento de servicios que no pueden lograr de otra forma, pero es que en muchos casos algunos de esos municipios, con menos de 100 habitantes, no deberían existir. Lo lógico sería agregar esos municipios micronesimos   a otros mayores, pero creando una legislación que obligue a estos a asegurar esos servicios mínimos. No obstante la mayor parte de las acciones de las Diputaciones pasarían a las delegaciones provinciales de las respectivas CC.AA. con las que ya tienen un solapamiento importante de temas, servicios y, lo que es peor, gastos. Por otra parte, es importante retirar a las Diputaciones del servicio, porque no responden directamente ante la ciudadanía de forma democrática, sus miembros son elegidos por comisiones y federaciones de los municipios implicados y, a veces, de los no implicados. Por esta razón, aunque sean útiles sus servicios, están muy lejos, en el ámbito de responsabilidades, de la ciudadanía a la que teóricamente sirven. No es de extrañar pues, que algunas Diputaciones Provinciales se hayan convertido en algo más parecido al funcionamiento de una mafia donde un Presidente Todopoderoso da y quita favores a su antojo. Si se fijan en Castellón, en Fabra, comprenderán a que me refiero, sobre todo si intentan preguntar con una cámara en la mano a su ciudadanía ¡Verán que pocos se atreven a decir nada malo de… su Padrino!
Imagen tomada de www.castellononline.com