viernes, 13 de diciembre de 2024

Tecnologías automovilísticas del futuro (adap. cap IV)

 

El hidrógeno como alternativa en los coches

(NOTA: Este artículo puede contener alguna información algo antigua ya que fue escrito originalmente en 2017.  He intentado, no obstante, actualizarlo en la medida de lo posible)

Se habla mucho de los coches de hidrógeno y de los coches eléctricos como alternativa a los de combustibles fósiles, pero ni unos ni los otros parecen preparados para substituir a los últimos en la próxima década. Aquí vamos a estudiar las razones.

Para entender un poco mejor de lo que hablamos tendríamos que recordar un proceso similar que tuvo lugar a comienzos del siglo XX: la pugna entre la corriente alterna (CA) y la corriente continua (CC). Aquel proceso se convirtió en una guerra que muchos recordaran como una pugna entre Edison y Tesla, cuando en realidad detrás hubo otros intereses y contendientes de los que nunca se habla. De hecho, aún hoy día hay ingenieros que no entienden la razón de que fuese la AC la que saliese victoriosa, ni tecnológicamente, ni por el hecho de que fuese Edison quien defendía la CC y que siempre se salía con la suya. Para los que solo conocemos los principios de la electricidad, la explicación de que la corriente continua perdía mucha más energía cuando se transfería a grandes distancias, parece una explicación concluyente. Sin embargo, son muchos los que proponen y propusieron, alternativas que hacían más atractiva la opción de Edison o, por lo menos, una alternativa intermedia con el transporte a largas distancias como CA y su transformación a CC cuando se bajaba la tensión para distribuir a los hogares.

Al final, el duelo entre CC y CA cayó del lado de la CA más por la aversión que producía el poder de Edison, que por las reconocibles ventajas técnicas de esta alternativa. Un Edison que se había apropiado judicialmente de los inventos de mucha gente y que, sin lugar a dudas, hubiera tenido un dominio tecnológico total para seguir apropiándose de lo ajeno. Podemos decir que elegir la CA tuvo la ventaja de liberar a muchos inventores que pudieron trabajar en esta tecnología con una menor amenaza de Edison. Sin duda fue de ahí de dónde provino el gran salto tecnológico que generó la CA.

Muchas décadas después nos encontramos con un caso similar en la guerra de los videocassettes domésticos. En este caso las alternativas eran 3: 2000, Beta y VHS. La primera, y que según muchos era la mejor alternativa, fue la 2000, creada por Phillips; la segunda fue la mejor acogida por los profesionales por su calidad, versatilidad y similitud con otras tecnologías, que fue la Beta de Sony; la tercera y que parecía la menos ventajosa de todas, fue VHS de JVC. Pero como todos sabemos fue esta última la que venció ¿El secreto? Fue una victoria totalmente comercial. Y es que ni Phillips ni Sony aceptaron perder nada del control de sus tecnologías, mientras JVC prácticamente liberó la suya. Para cuando Sony y Phillips quisieron reaccionar ya era tarde y VHS había invadido el mercado. Beta aún sobrevivió unos años gracias a los profesionales de TV, pero solo VHS tubo el placer de morir en los brazos de la digitalización.

A lo largo de la historia se han dado muchos casos similares con variados y sorprendentes resultados, como las diferentes redes que intentaron competir con Internet, pero que, o bien no contaban con el grado de apertura o con la versatilidad de esta red siempre en transformación. Hasta el mismo Billy Gates desperdició millones de dólares en un intento fallido.

¿Por qué iba a ser diferente el actual intento de encontrar un substituto para los vehículos impulsados por combustibles fósiles?

En la actualidad hay dos modelos base que parten con ventaja:

-El coche eléctrico.

-El coche de hidrógeno.

Pero, como veremos, ambas son dos posibles alternativas de futuro, pero  no el presente. De hecho, el coche eléctrico ha asomado la patita muchas veces desde los mismos inicios de la automoción. Pero le ha pasado algo parecido al Cine 3D y nunca ha terminado de arraigar.

En la actualidad ambas tecnologías tienen un enemigo económico que parece invencible: los lobby’s  del petróleo. De hecho, estos mismos lobby’s han retardado todas las tecnologías que pudieran hacer innecesaria la fuente económica que les alimenta, ya sea comprando bajo cuerda todas las patentes que pudieran fomentar sus desarrollos o ralentizando el montaje de sistemas de abastecimiento para los nuevos combustibles.

Quien crea que este no puede ser un hecho decisivo a la larga es que sueña. Precisamente han sido las negociaciones de Elon Musk con estos lobby’s lo que ha permitido dar a los coches eléctricos una pequeña ventaja. De hecho, en los próximos años tenemos que ver la llegada de baterías con grafeno y motores sin escobillas, que deberían impulsar esta tecnología. Claro que estos desarrollos también serán aplicables, de una forma u otra, a los vehículos HEV, PHEV y de pila de hidrógeno.

¿Cuáles son los problemas más habituales de los vehículos eléctricos?

El principal problema es al mismo tiempo su principal ventaja, y es lo más preocupante porque obliga a un cambio muy grande en nuestra sociedad.  Algo que jamás se ha podido hacer de un día para otro. Se trata de la necesidad de tener un acceso a un sistema de recarga. La solución que dan las comercializadoras es poner ese punto de recarga en el aparcamiento habitual del vehículo. Eso es algo estupendo cuando el cliente cuenta con un aparcamiento privado. Y es que, al menos nuestra legislación, ha creado alternativas para que estos puntos se puedan ubicar en párquines colectivos, pero es necesaria una transformación en el sistema eléctrico que se convierte en la semilla de la discordia. La cruel realidad es que muy pocos párquines han desarrollado esa posibilidad y aún no nos han llevado a los dos siguientes problemas.

Como hemos dicho, tener el punto de recarga en el aparcamiento habitual es una ventaja muy grande ya que se puede recargar el vehículo mientras no se usa y así hacer una carga lenta que es más eficiente y disminuye el peligro de sobrecalentamiento de las baterías.

Digo lo del sobrecalentamiento porque, tal y como pasa con muchos otros aparatos que permiten cargas rápidas, hay que ser conscientes de que estas son la principal causa de incendio en esta clase de vehículos y que, hoy por hoy, cuadriplican los que tienen los “peligrosos” vehículos de gasolina. En ambos tipos de vehículos hay consejos que pueden minimizar este peligro, pero hay que ser conscientes de que nada es inocuo y que las panaceas no existen.

(NOTA: en contra de lo que se pudiera pensar, cuanto más lleno esté el depósito de gasolina menor es la posibilidad de tener una gran explosión ya que hay menos aire que pueda entrar en contacto con este combustible).

Con los puntos de carga personalizados tenemos otro problema que ya ha causado estragos en países donde este tipo de electrificación está más avanzado: la sobrecarga de la red en el horario nocturno. Un hecho nada desdeñable cuando países como Dinamarca o los Países Bajos ya han recomendado a los usuarios que eviten hacer esos procedimientos todos en ese horario. Y es que, aunque se ha procedido a la mejora de la red eléctrica y la adaptación de los puntos de transformación, los estudios demuestran que si el vehículo eléctrico se impone es necesaria una red impresionante para que no se colapse, al tiempo que puede suponer un reto tecnológico para evitar un brutal desperdicio energético. Eso o el colapso.

Del siguiente problema ya hemos hablado y puede afectar también a otras alternativas porque tiene mucho que ver con la presión realizada por los lobby’s petroleros. Se trata de la falta de puntos de recarga en caso de querer hacer viajes largos. Por si esto no fuese suficiente falta una necesaria estandarización de estos sistemas de recarga (de esto podemos culpar a Elon Musk y su Tesla, que han potenciado estos reinos de Taifas en su propio beneficio).

Otro problema, no sabemos si relacionado con el anterior o no, es la falta de decisión por parte de los estados a la hora de decidirse por la electrificación. Y es que incluso los que en un principio vieron las grandes ventajas, dejaron de calcular los retos a los que se enfrentaban. Podemos decir que hoy solo China parece avanzar firme en el camino de la electrificación. Claro que los chinos tienen un gran acicate en la necesidad de descontaminar sus grandes urbes.

En cualquier caso, España, que antes de la llegada de Rajoy había apostado por las energías verdes, con la llegada del PP al poder destrozó todos los planes ecológicos y propició que prácticamente no se instalaran puntos de recarga en nuestro país. De ir en cabeza en renovables, pasamos a la cola en muy pocos años.

Por eso el coche eléctrico “puede” ser el futuro, pero no es el presente porque hay demasiados problemas a solventar, y solo que uno de ellos no se solucione adecuadamente, esta nueva aparición de los vehículos eléctricos en el panorama de la automoción, será un nuevo fracaso.

Y así llegamos a la otra alternativa que aún lleva más retraso que el coche eléctrico y ya veremos por qué…

Existen dos tecnologías de hidrógeno:

-Pila de hidrógeno.

-Combustión interna.

Después de enfrentarse a grandes problemas tecnológicos aún sin resolver en su totalidad, la combustión interna parece que va perdiendo la batalla frente a la pila de hidrógeno. En cualquier caso la gran ventaja del uso de este combustible respecto al de la electricidad, es que se puede almacenar y usarse solo cuando se necesite. Pero hay que tener en cuenta que, el hidrógeno, es un gas muy volátil y excesivamente ligero, por eso se intenta tener a muy baja temperatura y elevada presión, condiciones que no son nada estándar y tienen enormes riesgos, por los que en ningún caso pueden tener un uso doméstico. Claro que, hace 100 años, ante el brutal boom de los vehículos de gasolina, algunos se hacían, no desacertadamente, preguntas muy similares sobre esos vehículos y que ahora nos sorprenderían.

Hay a quien hoy le preocupa el rendimiento energético en la producción del hidrógeno ya que sus fuentes más conocidas son la hidrólisis o los hidrocarburos  procedentes del petróleo, el gas natural o el carbón. Obviamente estos últimos no supondrían ningún tipo de ventaja para lo que se pretende, no obstante debe reconocerse que pueden existir como recurso de emergencia o como solución de partida o solución transitoria, en una guerra económica generada por los lobby’s del petróleo. Claro que, la mayor parte de la electricidad que consumimos hoy día sigue teniendo como origen esos mismos combustibles fósiles.

Antes de proseguir con los problemas y bondades de los vehículos propulsados por hidrógeno (H), convendría entender un poco este elemento que ocupa la primera casilla de la tabla periódica y al que no se puede encasillar ni entre los metales, ni entre los no metales.

Para empezar el H es un elemento tan reactivo que se conocen combinaciones con todos los demás elementos salvo los gases nobles. Posiblemente sea la razón por la que aún exista este elemento en nuestro planeta ya que es tan ligero que libre tiende a escaparse al espacio. Por eso, prácticamente la mayoría de los sólidos y líquidos moleculares que vemos en la Tierra tienen algún átomo de H en su composición, extraerlos de una forma energéticamente rentable, lo abaratarían y lo harían mucho más rentable como combustible, tanto económica, como ecológicamente. De hecho, mediante la aplicación de ácidos sobre diferentes metales, se pueden obtener pequeñas cantidades. No obstante, hoy por hoy, se trabaja sobre fuentes eléctricas puntuales y renovables, en procesos electrolíticos, como solución que le haga rentable. Ya hemos dicho que su ventaja está en la posibilidad de producirse sin molestar a otros procesos y almacenarse.

Otra posible fuente para la extracción de H2 es el metano usado en lugar del gas natural, burbujeando en agua y entre placas catalizadoras.

Con todo, industrialmente, la forma de transportar hidrógeno para su obtención en el lugar en que se necesita es la Hidrolita (hidruro de calcio). Aún así es recomendada solo para pequeñas cantidades.

Hoy en día se estudia el aprovechamiento del hidrógeno como resultado del procesado de determinados alimentos, todo y que suele gastarse en su totalidad en la hidrogenación de aceites y en la industria cosmética.

*En la actualidad, a raíz de la guerra rusoucraniana se habla mucho más del hidrógeno verde como posible substituto del gas natural. Tanto es así que se ha ideado la construcción de un gaseoducto que comunique la costa catalana con Centroeuropa a través de Italia. Al parecer una o dos plantas de producción de H verde se ubicarían en las proximidades de la ciudad Condal y enviarían este combustible a los países que hoy dependen más del gas ruso.

Con todo esto vemos que rentable energéticamente o no, el H2 ya es una realidad como combustible. Otra cosa será aplicarlo a los vehículos comercializables. Pero ya existen algunos ejemplos (no existían en el momento de elaborar originalmente este artículo) que se comercializan en España, ambos de pila de hidrógeno (FCEV - Fuell Cell Electric Vehicle):

-El Hyundai NEXO, un SUV que tarda 5 minutos en repostar y tiene una autonomía de más de 600 km, pero tiene un poco accesible precio de más de 73.000€.

-El Toyota Mirai, de características similares, es una berlina de características deportivas y con un precio ligeramente superior (75.000€).

Como curiosidad la empresa TMB incorporó, en 2022,  8 autobuses de Toyota con esta tecnología como parte de la promoción municipal al hub del hidrógeno verde de la Zona Franca de Barcelona.

¿Cuál es el verdadero gran problema con el que tiene que lidiar el hidrógeno como combustible para automoción?

Más allá de los precios de esos vehículos hoy o la rentabilidad energética, el verdadero problema está en la carga de esos vehículos que debe hacerse con mucho cuidado por alguien cualificado. Eso implica contratar a personas para manipular las “hidrogeneras”. Esto ocurre precisamente cuando una gran parte de las gasolineras solo están asistidas en remoto y obligan a los conductores a manipular ellos mismos los surtidores de gasolina. Todos somos conscientes de que en este nuevo mundo dominado por el neoliberalismo salvaje, lo último que quieren las empresas es tener empleados, responsabilidades y, mucho menos, pagar salarios justos.

Más allá de todo esto, y como ya vimos con los sistemas de carga para coches eléctricos, lo de encontrar centros de carga de hidrógeno es aún mucho más complicado. De hecho, en Barcelona que se supone que es el lugar de entrada de esta tecnología en España, solo existe el centro de carga del hub de Zona Franca. Así que si decimos que la eléctrica es una tecnología aún del futuro, en el caso del hidrógeno esto es más obvio. Ninguna tiene un presente.

Podemos seguir hablando mucho de estas dos tecnologías, de sus rendimientos energéticos, de sus rendimientos económicos, de lo que ustedes quieran, pero lo que está claro es que triunfará aquella a la que, llegado el momento le den la posibilidad de hacerlo, como ha sido siempre.

*Y no, la termodinámica nunca ha sido un factor importante en la elección del modelo a seguir, porque de haberlo sido aún funcionaríamos  con carros y carruajes tirados por tracción animal. Eso sí, la tecnología y biotecnología los habrían hecho más efectivos. No puedo dejar de imaginar un carro deportivo tirado por guepardos manipulados genéticamente.



Bibliografía:

“Tecnologías automovilísticas del futuro” VV.AA. (capítulo IV: Futuro medio - aún en elaboración).

“Recetario industrial” Gardner D. Hiscox y Albert A. Hopkins

“Química Inorgánica Avanzada” Cotton y Wilkinson

“Físico Química” Ira N. Levine

“Nueva Guía de la Ciencia” Isaac Asimov

“Tesis sobre los factores económicos de la Ciencia y la Tecnología” Juan Antonio García Mellado.

“Una breve historia de casi todo” Bill Bryson

“Enciclopedia Visual” VV.AA.

Web de TMB

Web de Hyundai

Web de Toyota

Web del Ayuntamiento de Barcelona

Hemeroteca de “Metro” Ámsterdam

 

 

 

domingo, 27 de octubre de 2024

¿Cómo se ha llegado al 0-4 en el Bernabeu?

 

Cada temporada digo lo mismo: hasta la décima jornada no se puede hablar de lo que realmente se espera de un equipo. Y con el Barça de este año no iba a ser diferente. Es cierto que Hansi Flick llevó a la gira por EE.UU. un equipo de circunstancias plagado de jugadores del filial, pero que futbolísticamente convenció. Sin embargo el Gamper supuso un bajón considerable en el que un Mónaco aparentemente más rodado, puso todo en su sitio.

Empezó la temporada con muchas bajas y se ganó en Valencia con muchas dificultades, pero partido a partido vimos un equipo que crecía y convencía. La grave lesión de Bernat nos hizo creer que el reciente descubrimiento de un nuevo Busquets había terminado mal. Pero Casadó, con su propio estilo, se ha convertido en otro sorprendente baluarte en esa posición.

Europa nos cruzó de nuevo con el Mónaco donde se repitió un error que ya vimos en el Gamper con el primer gol del Mónaco, pero esta vez acabó con la expulsión de Éric García. El Barça perdió porque con 10 le fue imposible seguir haciendo su juego, pero vendió cara esa derrota. Entre victoria y victoria corría la euforia entre la afición y realmente todo pintaba bien. Hasta ahora todo habían sido grandes partidos, salvo frente a Osasuna, en que Flick quiso dar descanso a un mismo tiempo a Raphinha y a Lamín Yamal. Fue una derrota dolorosa, pero el equipo siguió líder. Un liderato que llegó a la jornada 10 con una impresionante goleada al Sevilla.

Pintaba bien, pero el Barça aún no se había enfrentado a ningún “grande”. Pero el miércoles llegó la tan esperada prueba de fuego que acabó con sobresaliente: 4-1 a la bestia negra del Bayer de Munich. Así que lo acontecido la pasada noche en el Bernabeu estaba en el imaginario de todos los culers. Ver al Barça pasar por encima del Real Madrid 0-4 se ha disfrutado tanto como esperado era. Que Ancelotti afirme que no vio tanta diferencia solo indica lo poco que sabe de lo que ha pasado.

Y es que llevamos semanas diciendo que el Madrid no juega a nada y que gana los partidos más por ayudas arbitrales que por méritos propios. Sin embargo hoy hemos descubierto algo más. Y es que los merengues basan su juego en romper el juego del rival y sacar provecho de la desesperación de este. Algo muy propio de la filosofía futbolística de las escuelas italianas. Y hoy, durante la primera parte, casi le funciona. Por suerte Flick lo ha visto y ha cambiado a Fermín por De Jong, quitando pólvora a la zona de desmarque, pero mejorando la zona de creación. Eso unido al desgaste de las puntas del Madrid, ha generado jugadas con más posibilidades de definición. Tanto es así que el partido ha acabado 0-4, pero la diferencia pudo ser mayor.

Claro que el Madrid también pudo marcar algún gol, pero unas veces la excesiva aceleración de sus puntas, como Vinicius, que acabo regateándose a sí mismo, y otras las magníficas intervenciones de Iñaki Peña, acabaron con las posibilidades de un Madrid que vivía entre el fuera de juego y la desesperación defensiva.

En Madrid no se lo esperaban, en Barcelona sí. De ahí, casi seguro, la mala reacción de Ancelotti.

Hay que reconocer que, si bien va a ser muy difícil olvidar a Ter Stegen, lesionado para toda la temporada, es esperanzador ver el crecimiento de Iñaki Peña y como, poco a poco, va adquiriendo los automatismos necesarios para la portería del Barça de Flick. Lástima que sus pases aún no tengan la precisión del portero alemán.

Por todo esto, para terminar, ahora sí, reconocer el gran trabajo de Flick, aplicando una nueva fórmula que, si bien no es propia del ADN Barça, sí significa una nueva evolución en los conceptos futbolísticos.

domingo, 30 de junio de 2024

El nuevo auge del fascismo

 

Con las elecciones francesas los medios de comunicación nos bombardean de nuevo con una oleada de información sobre la ultraderecha. Estos bombardeos tienen una vertiente positiva, la de darnos más datos, pero también tienen una vertiente fea que es la de dar más visibilidad a estos partidos que suponen un peligro para la sociedad ¿Dónde está el equilibrio? Porque por un lado es necesario saber qué y quienes son para podernos enfrentar a ellos, pero por otro, la mayoría de la gente que en general ha estado mal preparada políticamente, puede caer en sus garras como pajaritos. Sin ir más lejos, en nuestro país, los medios de comunicación, llevan años ahuyentando a la gente de los temas políticos mientras le cuentan historias terroríficas, mayoritariamente falsas, sobre el comunismo o cualquier otra ideología de izquierdas. Lo más gracioso ha sido ver como hablan del socialismo como un tipo de comunismo al que pintan con rabo y cuernos y, a un tiempo, afirman que nazismo y fascismo son socialismo. Después, esos mismos medios, son los que venden fascismo y nazismo a manta como si fuese la panacea. Y los pajaritos que se alimentan con el grano de esos medios, compran fascismo sin analizar semejante contradicción ¿Dónde dejaron sus cerebros aparcados?

La cuestión es que, al margen de los medios de mierda como A3media, Mediaset o la propia RTVE cuando ha estado en manos del PP, además de otros menores que dan hasta risa por su poca fiabilidad informativa, el resto de medios trabajan con seriedad y, aún con sus pocos medios y demasiadas presiones externas, logran sacar adelante informaciones que pueden ser muy esclarecedoras. En este ámbito recomiendo a las corporaciones de radio y televisión vasca y catalana, a los diarios en red “Público”, “ElDiario.es” y “La Marea”. No siempre dan en el blanco y no siempre superan las presiones, pero lo intentan de buena voluntad y dan lugar a informaciones aceptablemente fiables. No son los únicos, pero en general hay que huir de las grandes corporaciones dominadas por sociedades capitalistas a las que les “urge” el dominio del fascismo.

Qué hemos aprendido de la buena información (a menudo también de la mala). Lo primero de todo es que el fascismo no se crea ni se destruye, solo se transforma, porque es algo natural en las ansias de poder del ser humano. El fascismo enfrenta a grupos de personas inventando maldades en el grupo a batir. El fascismo, como la religión, trabaja con el mundo de los mitos para beneficiar a unos pocos en el mundo de lo tangible. Si el fascismo habla mal de la inmigración, extendiendo los pecados de unos pocos en el de todos los inmigrantes pobres, es para que sus líderes obtengan un poder y un dinero muy tangible para sus líderes. Pero su patriotismo y su odio a los extranjeros son muy selectivos, porque no dudan en aceptar tratos con extranjeros ricos o pactar con otros como ellos. No es extraño pues que Le Pen y Trump pudieran aceptar ayudas de Putin, que VOX obtuviera dinero fundacional de terroristas iranís o que Meloni y Milei fuesen ayudados por la CIA, la primera como vía para controlar Europa y el segundo para apoderarse de las riquezas naturales de Argentina.

Así visto, la extrema derecha también podría entenderse como una fórmula para controlar a un país sin invadirlo. Solo haría falta aprovecharse de la dejadez con la que las nuevas generaciones han crecido sin interesarse por algo tan esencial como es la política ¿Si en EE.UU. funcionó, por qué no habría de funcionar en el resto del mundo? Y es que el nuevo fascismo ya no lleva traje militar y, si me apuran, ni siquiera necesita la corbata.  

Pero acabamos de descubrir que no todos los fascismos son iguales, aunque exploten lo mismo y persigan similares fines. De hecho, salvo en casos muy concretos, se ha eliminado el culto personal. El nuevo fascismo es mucho más pragmático. Los casos de Trump y Milei deberían estudiarse aparte; pero el rechazo de el Reagrupament Nacional francés a Alternativa para Alemania, por considerar a estos excesivamente extremistas, nos puede dar una pista de hasta qué punto el nuevo fascismo es capaz de camuflarse para introducirse en las estructuras de la democracia. Si hace treinta años avisábamos del peligro que suponía no poner trabas en el juego democrático a aquellos que no creían en la democracia, hemos vuelto a hacer tarde.

Pero ya no estamos ante Hitler, Mussolini, Franco, Somoza, Videla, Galtieri, Pinochet o Stalin (lo siento, pero Ióssif, por muy comunista que fuese su sistema, era un fascista de libro), el nuevo fascismo es impersonal, pero con una capacidad para quebrar las estructuras mucho mayor. Detrás hay años de sabiduría, pero no en sus líderes, sino en un colectivo que se beneficia de sus acciones y que hará creer a los votantes de esta extrema de derecha que todo es por el bien del país hasta que este se desmorone, primero moralmente y luego económicamente. Esta vez no hará falta ninguna guerra, aunque las habrá, pero el desastre podrá ser aún mayor.

¿Qué ocurrirá después? ¿Cuándo acabaremos con esto?

Son respuestas que por ahora son difíciles de imaginar. Pero dada la capacidad del fascismo para hacer creer a sus seguidores que los problemas por ellos generados son culpa de otros y el control de los medios de comunicación, podemos pensar que se podría llegar al desastre final… Incluso al final de la vida sobre la Tierra. Y la única arma con la que contamos es dar más cultura política a la gente.

Lo tenemos muy mal.

viernes, 26 de enero de 2024

Policía patriótica, Ayuso y la Operación Catalunya

 

Las bases fundamentales de la democracia, los principios más elementales de la Constitución y el respeto a la ciudadanía (toda la ciudadanía) han sido sacudidos por el escándalo de la policía patriótica y la Operación Catalunya. Y es que, en contra de lo que pueda decir la alienada presidenta de la Comunidad Autónoma de Madrid, la señora Isabel Díaz Ayuso, el uso de mecanismos ilegales, antidemocráticos, que falten a los derechos humanos y hasta son inconstitucionales, jamás pueden ser admisibles para proteger la unidad de España. Y es que esta señora, ni su partido, más de ultraderecha que de lo que quieren reconocer, la pérdida de valores democráticos es la razón más elemental y necesaria para deshacer el estado español. Si todos los españoles no pueden vivir bajo los mismos derechos, si no se respetan los derechos de todos y se mantienen los privilegios de los de siempre, la cosa va muy mal, pero si su gente, la de esa señora y todo el fascismo estructural de este país asume saltarse las normas que le venga en gana en pro de una unidad que no respeta a más de la mitad de los ciudadanos del estado, ese estado no merece existir.

El PP, más que nadie, debería reflexionar cuando tantas veces se autodenominado como constitucionalista y resulta que a la primera de cambio se salta esa Constitución, se limpia el culo con ella y aún pretende defender su infamia envolviéndose en el trapo de una bandera a la que ha robado cualquier buen significado que algún día hubiese podido tener.

En cuanto a esa policía patriótica, el CNI, el juez García Castellón y toda esa cúpula judicial que solo sirve para ponerse al servicio del fascismo, solo decir que deberían, como poco, ir todos al paro por inútiles. Han intentado implicar a muchas personas con los CDR’s, el Tsunami democrático y hasta se han inventado un terrorismo en cualquier protesta que no fuese de su gusto, y después de utilizar su “ilegalidad vigente”, atravesando todas las líneas rojas, haciendo uso de la fuerza, la manipulación y la desvergüenza más absoluta, solo han conseguido demostrar eso… Que son unos ineptos, faltos de toda profesionalidad y unos delincuentes que se aprovechan de una impunidad que destruye los cimientos de la democracia y los valores más elementales sobre los que supuestamente está construida España. Bajo estas ya reconocidas premisas, y el terror infundido a todo un pueblo con sus dañosas acciones, solo queda denunciar a esta conjura por terrorismo. Y es que aunque no hubiesen usado armas (que si las han usado), ni bombas (que las han inventado cuando les convino) han usado su poder y han abusado de él para generar ese terror, incluso con imperdonables actos de extrema violencia. Cumplen con todos los requisitos para ser juzgados por terrorismo, pero todos sabemos que eso no ocurrirá porque quien debe juzgar esos delitos en este país es un juzgado que desciende directamente de los juzgados de la dictadura franquista, y tomado por los jueces más alienados de la ultraderecha que, una y otra vez, nos han demostrado que son incapaces de respetar los más elementales principios democráticos cuando se trata de juzgar a cualquiera que se aleja de su ideología.

Sinceramente, mientras personajes como la señora Ayuso se puede permitir hacer una defensa tan vomitiva sin pagarlo en las urnas, como ocurriría en una auténtica democracia, va a ser muy difícil limpiar la cara, los tribunales, la policía y los servicios secretos, de un personal a los que la democracia les importa un bledo y se mueven continuamente para dañarla y permitir que unos privilegiados sigan viviendo del resto de la ciudadanía, y aquel que no lo acepte, encontrar la forma de represaliarlo.