lunes, 28 de septiembre de 2009

¿Usamos bien los teléfonos móviles?



La verdad sobre la telefonía móvil.

Consejos para el buen uso de la telefonía móvil:

--Limitar el número y duración de las llamadas.

--Usarlo como instrumento de emergencias o localización dando preferencia al uso de la telefonía fija.

--Preferir el uso de manos libres o cualquier fórmula que permita alejar la antena y la fuente de radiación de la cabeza.

--Cuando se porte el aparato en standby, procurar tenerlo la más lejos posible del cuerpo y en especial de los riñones, corazón, ojos y cerebro.

--Evitar, en lo posible, su uso en interiores, dado que tiende a aumentar su potencia de emisión para atravesar estructuras sólidas.

--Vigilar los cargadores eléctricos y sumar las recomendaciones habituales para este tipo de elementos.

--Hasta hace poco su uso estaba prohibido en los aviones, de hacho aún se necesitan permisos especiales dado que pueden interferir en la electrónica de estos. Así mismo no esta indicado para personas que usan marcapasos, también pueden alterar el funcionamiento de estos, así que, además, debe procurarse mantenerlos alejados de estas personas.

--Su uso en vehículos está regulado por las normas de tráfico ¡Respetarlas!

--Controlar su uso en lugares públicos, en especial junto a jóvenes y niños, más sensibles a los perjuicios de las radiofrecuencias.

--En general, las antenas deberían estar retiradas de las viviendas y zonas concurridas.

Como es obvio, pocos o ninguno de estos consejos establecidos en el año 2000 es seguido total o parcialmente.

El gran problema y peligro de este sistema de comunicación es que hemos olvidado todas sus perniciosas características y sus posibles consecuencias, en favor de nuestra comodidad y el fenomenal negocio que se ha establecido.

Hay que recordar que el teléfono móvil es un emisor receptor de microondas de baja potencia y alta frecuencia. Estos aparatos emiten en la banda UHF entre 900 y 1800 MHz con una potencia teórica máxima de 2Watios (límite legal establecido para evitar el calentamiento de los tejidos de la cabeza), sin embargo, en algunos aparatos, la potencia puede llegar a los 8W. Como es de suponer, la radiación más peligrosa es la que parte de un punto más próximo al individuo ya que después, al expandirse la señal, la potencia incidente es menor. Por eso la potencia emisora del aparato personal es muy importante y la posibilidad de utilizar elementos que alejen su antena de las partes sensibles del organismo es muy a tener en cuenta. Por otra parte, es conveniente el uso del terminal en las mejores condiciones de comunicación con la antena de zona, dado que este terminal aumenta o disminuye la potencia de emisión en función de estas condiciones.

Ya no hablaremos de los teléfonos vía satélite, mucho más potentes y por ello potencialmente más peligrosos, porque su elevado coste los hace inusuales. Pero si tendremos en cuenta que las nuevas generaciones, con frecuencias mayores, son energéticamente más poderosas y merecen nuevos estudios que no se han llevado a cabo correctamente. Por ejemplo los GSM son potencialmente más peligrosos que los arcaicos sistemas analógicos y los UTMS aún más peligrosos que los anteriores. Hoy ya hablamos de sistemas de entre 3,5 y 24,5 GHz.

Es importante tener en cuenta que las microondas se usan para generar vibraciones en determinadas uniones moleculares, ya sea para intervenir estas o para el análisis de las moléculas. Así los microondas caseros actúan a 2,45 GHz haciendo vibrar la unión H-O de la molécula de agua, provocando el calentamiento de todos los materiales que la contengan. Así mismo, otras frecuencias pueden incidir sobre otros enlaces (especialmente covalentes) de átomos diferentes y no todos son igualmente conocidos ni evitados en la radiación de la telefonía móvil. Las empresas de telecomunicaciones han realizado muchos análisis sobre la incidencia de unas potencias u otras en el uso de la telefonía, pero han evitado, disimuladamente, llevar ese estudio a toda la gama de frecuencias.

Las entidades que han elaborado los estudios existentes sobre telefonía han definido los efectos observados en usuarios de esta telefonía y afectados por la proximidad a antenas repetidoras en un cuadro de síntomas:

--Incremento del estrés con alteración de las ondas cerebrales y otros ritmos orgánicos.

--Pérdida de reflejos, retardo en la toma de decisiones, pérdida de memoria, mente en blanco, problemas de concentración.

--Dolores de cabeza persistentes.

--Trastornos varios del sueño.

--Alteraciones auditivas, zumbidos, mareos y vértigo.

--Alteraciones del ritmo cardíaco.

--Hipertensión.

--Irritabilidad.

--Calentamiento de tejidos blandos, en especial la cornea con riesgo de sufrir cataratas.

--Quemaduras cutáneas (eritemas).

--Distonías vegetativas.

Una larga exposición, aún no habiéndose manifestado los síntomas anteriores, puede dar lugar a depresión, ansiedad, tumores, bajada de las defensas inmunológicas, aparición o aumento de las verrugas, necesidad orgánica de aportes más elevados de las vitaminas hidrosolubles porque se destruyen “solas”.

Cuestiones adicionales.

La enorme proliferación de la telefonía móvil, sobre todo en los últimos cinco años, ha llevado a que no se contemple casi ninguna de las medidas preventivas. Posiblemente el teléfono móvil no sea un peligro inminente ni visible para las personas, pero hay que tener en cuenta que esa era la misma percepción que se tenía del tabaco hace 50 años. También como en este, tenemos “fumadores pasivos” de la telefonía móvil. Creo que podríamos llamarles “usuarios pasivos” a todas esas personas que sin disfrutar de las ventajas de este medio de comunicación, quedan al alcance de las radiofrecuencias y sus posibles efectos secundarios.

Además de los propios aparatos ya hemos hablado de las antenas de reemisión, pero al hacerlo nos hemos referido únicamente a los enlaces entre estas y los teléfonos móviles, sin embargo, la mayoría de estas están enlazadas con otras antenas con una gama de frecuencias entre los 900 y 1800 Megahercios y potencias de entre 15 y 150 Watios (realmente perturbadoras). Aunque se desaconseja su instalación próxima a guarderías, escuelas, hoteles y hospitales, no existe una verdadera normativa al respecto y de haberla se incumpliría metódicamente ya que lo contrario obligaría a su unión mediante cables (fibras ópticas) y la instalación de pequeñas centrales en su base que encarecerían este servicio.

Desde hace tiempo, sobre todo con lo que respecta a las ciudades, se viene demandando la creación de una única red unificada de telefonía móvil para evitar la anárquica proliferación de antenas y la brutal contaminación de frecuencias que nos invade. Debería sorprendernos como las compañías de este tipo de telefonía han creado infraestructuras propias cuando han sido tan reacias de hacerlo en el caso de la fija.

También deberíamos rebelarnos contra la brutalidad de ofertas que nos animan a consumir telefonía móvil por placer a pesar del peligro que implica y se ignora continuamente. Sin duda nos dejamos vencer fácilmente por la comodidad, pero la progresión en los casos de determinados tipos de cánceres (leucemia, cerebral, tiroideo, páncreas...) indica que algún nuevo elemento ha empezado a actuar en su progresión y estas radiaciones son una de las posibles respuestas.

Imagen tomada de somosmac.com

sábado, 26 de septiembre de 2009

El ojo que todo lo ve y la justicia ciega.


PRIMER JUICIO DE LA HUMANIDAD CONTRA DIOS.

Se juzga por los cargos de posesión y uso de armas de extinción masiva.

Habida cuenta que el acusado no se ha presentado a las audiencias previas a este juicio ni ha respondido a los requerimientos dados por este tribunal. Se procede a seguir con los autos dando al susodicho como declarado en rebeldía.

Se inician pues los procedimientos inculpatorios por los delitos de posesión y uso de armas de extinción masiva en base a las pruebas documentales presentadas por la acusación y basadas en el panfleto publicitario usado por sus seguidores y conocido por los nombres de Torá, Biblia y Antiguo Testamento, entre otros. Se han analizado, para el proceso que ahora nos afecta, los capítulos relativos a la desaparición de las ciudades de Sodoma y Gomorra y a los concernientes al poco claro suceso del Diluvio Universal.

En referencia a estos cargos se solicita a las partes que presenten sus testimonios, previos al juicio, antes del día 30. Así mismo se recuerda la necesidad de aportar cualquier prueba que se considere de interés, antes de esa fecha, para permitir el estudio de las mismas por la parte contraria, con la antelación suficiente, es decir, 24 horas antes de la ejecución de los autos. También se advierte que la presentación de nuevas pruebas durante el proceso quedará limitada a la normativa del tribunal.

Sin más preámbulos se cita a las partes para el día 1 en este juzgado con el fin de escuchar las anotaciones previas de las partes.

El Presidente del tribunal de justicia del mundo libre de dogmas.

Intermundo a 18 de octubre de 2007.


AVE a quién le toca



Todas las ciudades del mundo están atravesadas por túneles: ferrocarriles, autovías, servicios varios. El túnel es una fórmula correcta y habitual para descongestionar las urbes modernas. Muchos recordamos aquellas vías de ferrocarril que atravesaban las zonas industriales de nuestras ciudades y que separaban barrios enteros cada vez que un “mercancías” pasaba por allí. Que decir de los cables eléctricos y de teléfonos que rallaban el cielo de nuestras calles saltando de fachada en fachada y de poste en poste. Y en las zonas medievales, como reliquia histórica, vemos unos canales centrales por donde un día bajaron las “aguas sucias”. También hemos perdido de vista los canales de riego, los pequeños riachuelos y las torrenteras que aliviaban las montañas de los alrededores inundando nuestras calles cuando llovía torrencialmente. Hoy todo eso son espacios que ocupan diferentes estratos de nuestro subsuelo metropolitano.

Así pues, a nadie le extraña cuando las impenitentes obras aparecen en la puerta de sus hogares para excavar una zanja, ya sea para realizar una reparación o para introducir uno de esos servicios. Es algo que, por lo general, supera los límites de la simple molestia, pero como acostumbra a ser algo limitado en el tiempo y posee una lógica de necesidad innegable, nadie se queja más allá de las barrabasadas innecesarias que se generen debido al mal proceder de los “técnicos”. Los problemas empiezan cuando las obras se alargan en el tiempo, en ese momento cualquier pequeño ruido innecesario, cualquier proceder fuera de lugar, cualquier trabajar sábados y domingos o en horarios que no dejen dormir… es una tortura para los vecinos que ya han sido condenados a padecer ese suplicio en teórico beneficio de la ciudad. Así debieron ser, en Barcelona, las obras del Carmelo que terminaron ultrajando la vida de un centenar de familias. Qué se puede decir cuando ves un bloque de pisos partido por la mitad, mostrando las fotos familiares, los abiertos cajones de la cómoda, la escobilla del wáter… y a un anciano llorando amargamente la pérdida de toda una vida bajo los escombros aún a pesar de que no hubo víctimas. Los hogares tienen alma, pero no cuentan.

El bien de la ciudad prevalece. Así se lo han dicho a los vecinos de la Sagrera que llevan más de tres años asaetados con las obras del intercambiador para la línea 9. Aún así, entre protesta y protesta, saben que el día que su suplicio acabe, tendrán un nuevo servicio en la puerta que revalorizará sus viviendas. Sólo piden que no les agredan más de lo necesario, porque el capitalismo y las obras no entienden nada sobre el bienestar de los ciudadanos. En cuanto a los profesionales de la siquiatría sólo significan un aumento de la clientela.

¿Y el AVE?

“Nari nan, nari nan, nari nan”… como diría “La Trinca”. Un túnel que atravesará la ciudad de punta a punta (de Sants a la nueva estación del Norte que en origen debió ser la única), obligando a los convoyes a circular a una velocidad reducida, con subidas, bajadas y curvas no adecuadas para este tipo de medio y generando una serie de vibraciones que otros medios de transporte subterráneo no harían jamás. Por si fuera poco, el AVE, por el centro, no supone ningún plus para la ciudad y pone en peligro a muchos edificios, incluido el popular Templo de la Sagrada Familia. Por si todo esto no fuese suficientemente indignante, se ha evitado, mediante oportunos desvíos, pasar por delante de los hoteles más importantes, reduciendo el impacto a este colectivo que, además, pretendía un apeadero en pleno Paseo de Gracia.

El AVE que hoy se construye nada tiene que ver con aquel que a principio de los años ochenta diseñamos con nuestro corazón todos los barceloneses y la mayoría de catalanes. Aquel tenía una única estación en lo que hoy es el centro comercial de “La Maquinista” y lanzaba su vías hacia Francia en busca de París y después el resto de capitales europeas. Con el tiempo también llegaría a Madrid, pasando por las grandes poblaciones del Vallés (Sabadell y Terrassa) y acercándose al flamante aeropuerto internacional de la Catalunya Central. El AVE de nuestros corazones nos abría al mundo, este de hoy le ofrece un par de paradas en nuestra ciudad al metro de Madrid.

Esto es triste, pero no duele demasiado, ya hace mucho que aprendimos a que nuestros sueños fueran robados con las escusas más absurdas. Tampoco es tan doloroso ver el enorme agujero que alcanzará más de treinta metros de profundidad pegándose a la fachada de tu edificio. Empieza a ser algo molesto que algunas empresas de transportes se nieguen a traerte según que artículos hasta casa porque tienen que llevarlos a mano y por pasos muy estrechos durante demasiados metros. Ni el año mal durmiendo porque una grúa chirria a las 7:30 de la mañana y otra a las 23:15 amenazando con colarte una viga por la ventana (sábados y domingo inclusive).

Lo verdaderamente molesto es que aún existan políticos sinvergüenzas que se atrevan a decir, a los medios de comunicación, que nadie quiere las obras en la puerta de su casa y que por eso la gente se junta a protestar. Y el adalid de esta clase de insultos a la ciudadanía es nuestro alcalde, el señor Hereu… ¿Señor Hereu –por curiosidad- cuantas obras tiene en la puerta de su casa?

Junto a mi bloque tengo ya una vía de metro (línea 1) y otra de tren, además, por la otra manzana de más abajo pasa otra de metro (línea 2) y aún otra más abajo otra de tren. Todas se construyeron aquí y no hubo ninguna de las actuales quejas ¿No desmiente eso las reaccionarias manifestaciones del alcalde? Pero es que metro y cercanías, además de las vibraciones que convierten la toma de un baño normal en un jakuzzi, ofrecen un servicio que da valor a nuestras vidas y nuestros hogares… ¿Pero el AVE? (este AVE, quiero decir).

El túnel del AVE, para pasar bajo la línea 1 y cercanías, bajara hasta unos 30 o 40 metros de profundidad, sin embargo, en un par de manzanas tendrá que ascender a sólo dos. Esa será una rampa brutal que deberá realizar a baja velocidad pues a continuación tendrá que hacer una ese con dos ángulos rectos. El AVE es un tren de vagones largos y no adaptados para el subterráneo, las vibraciones que generará serán unas seis veces mayores que las líneas de cercanías (las peor adaptadas al paso subterráneo). A partir de ahora ya no tendremos jakuzzi, directamente nos expelerá del baño con todo el agua de la bañera.

Parece que este desastre ya no tiene remedio, tal es la voluntad de nuestros mediocres políticos, ¿pero alguno ha pensado en compensarnos por el desaguisado? ¿Para qué? ¿Quién de los afectados volvería a votarles? Como son votos perdidos seguros ya se aprovecha para barrer toda la mierda hacia el mismo agujero. Cuando se acaben las obras, el tramo afectado de la calle Mallorca se convertirá en una vía rápida por donde miles de coches pasearan sus humos y bocinas ante el rojo de la Meridiana. Las estrechas aceras de ese tramo que nunca permitieron poner una marquesina a las paradas de autobús, seguirán igual de menguadas y los negocios, que hoy han abandonado la calle asfixiados por la obras, ya nunca volverán, porque nadie va a hacer nada para que esta zona se recupere. Así que a la paletada de tierra le seguirá una de mierda y el alcalde feliz. Entre tanto, una manzana más abajo, bajo el colegio de curas se ha realizado una pequeña zona de maniobras para la línea 2 y han compensado al colegio con un carro de millones que ha servido para que este verano lo hayan reformado de arriba abajo. Curiosamente ese es el colegio electoral donde nos toca votar… ¿pretendían que no nos enteráramos o es que les da igual?

Enlaces interesantes que pueden ayudar a la comprensión de este artículo:

http://www.cucadellum.org/2008/07/nota-de-prensa-de-ave-pel-litoral-ave.html

http://www.cucadellum.org/2009_02_01_archive.html

La actual imagen corresponde a la llegada de la tuneladora bautizada como “Barcino” y fue publicada en la web de “La Razón”. Los actuales problemas informáticos que padezco me impiden publicar fotografías propias más actuales y, sin duda, más interesantes.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Revilla vs. Laporta: ¿Democracia? ¡No, gracias!


Ya hace meses que nos quejamos de lo mal que separa su vida como presidente del Barça de la personalidad particular y política que es, el señor Laporta. Todo el mundo puede tener sus ideas independientemente de quien sea, pero debe cuidar muy bien de en que foros se expresa. Eso no quita de que su impronta en la entidad blaugrana no deba estar impregnada de las ideas que mantiene, eso sí, siempre desde el respeto a la propia entidad, sus significados y las personas. Dicho esto, y a pesar de la crítica que supone al presidente blaugrana, hay que señalar que hay personas, y supuestas personalidades, que aún andan más erradas en sus funciones y funcionalidades que él. Y de esto hemos sido testigos todos los españoles en las últimas horas.

Los invitados a los palcos de los campos de fútbol, por desgracia, acostumbran a ser personas muy poco deportivas y aún menos ligadas al significado de lo que se juega en el césped. Por esa razón sus conversaciones tratan sobre temas que nada tienen que ver con el juego. Así ayer Laporta se vio acompañado por el presidente de Cantabria (personalidad que hasta la fecha me había caído muy simpática) y soltó la indiscreta frase pseudopolítica: “Estáis machacando a Cataluña”. Claro, castellano y, muy posiblemente, fuera de lugar. Pero si la indiscreción de Laporta fue cuestionable, aún resultó peor la actitud del señor Miguel Ángel Revilla que se picó más que una guindilla (iba a decir que un chorizo picante, pero hubiera estado doblemente mal).

Esta vez, la poco asesada actuación del mandatario blaugrana, sirvió para descubrir un personaje realmente fraudulento que se ha instalado en la política de nuestro país con un populismo más hipócrita de lo que está dispuesto a reconocer. Posiblemente hoy habréis escuchado las declaraciones que el presidente montañés despachó en un foro, teóricamente deportivo como “El Larguero” de Cadena Ser, pero en ningún lugar las críticas descarnadas que ellas merecen. Los periodistas de prestigio se han echado a un lado dadas las prebendas habituales que el Chávez de Cantabria les da. Y no hablo de las anchoas, sino las declaraciones y otros juegos corteses que sirven a esos figurantes de la información para mantener su prestigio en el universo de la noticia.

A quien no le agrada la imagen de Revilla en el programa de Buenafuente, en “el Intermedio” o en cualquier otro que le permita manifestar su humanidad jovial a los cuatro vientos. Sí, Miguel Ángel Revilla parecía un político atípico y del pueblo, pero ha resultado ser un palurdo intransigente que pretende acaparar todos los micrófonos.

No dudo que a Revilla no le guste el independentismo catalán, pero este es un país libre y democrático (o por lo menos otros como él se jactan de ello) y él un representante político del mismo, así que al criticar esas posturas, de la forma en que lo hizo, estaba haciendo un ejercicio de todo lo contrario a lo que es realmente democracia. Además, eso lo extrajo de una sola frase que le molestó: “Estáis machacando a Cataluña”. Es decir, que para negar la expresión que le molestaba pasó al ataque haciendo acusaciones infames, antidemocráticas, fuera de lugar y en un foro que no le pertenecía (de esto último puede ser más culpable el medio de comunicación que el político). Todo un ejemplo de un gran político español previo a la transición y que también nos recordó aquella Pilar Rahola que gritó a la guardia urbana: “¡No saben quién soy yo!”… otra decepción del populismo político. Pero Revilla aún fue más allá, porque tampoco era nadie para rebatir la frase que tanto le molestaba. Es difícil para un agresor saber que lo es, incluso, a veces, es difícil para la víctima. Para comprender lo que se le decía tenía que haber estado en Cataluña, tenía que haber tenido una sensibilidad especial para entender lo que se le decía, pero estaba más preocupado por atender a una acusación que, a pesar del plural, él hacía totalmente propia.

Revilla, tal vez en un golpe de iluminación repentina, para no perder su buen nombre ante los catalanes o quizá para hacer creer que le preocupaban algo más que su traje, insistió en que “hay que separar a los catalanes de personajes como Laporta”. Era tarde, Miguel Ángel Revilla ya había terminado de machacar a Cataluña, a la democracia y a todo razonamiento humano.

Tristes, muy tristes las declaraciones de Revilla, no sé si espoleadas por el resultado del partido que, desgraciadamente, pasó a un segundo plano, especialmente ante la prensa de Madrid que busca cualquier excusa para encumbrar al Real Madrid y asaetar al Barça. Esta vez, gracias a Revilla lo ha conseguido.

Por si esta desgracia no fuera suficiente, el señor Joan Laporta, en unas declaraciones a Europa Press Televisión, quedó como un señor sabiendo no hacer leña del árbol caído (por Revilla): “Respeto la opinión del presidente igual que respeto a Cantabria y confío en que también se respete mi opinión”.

Dice Miguel Ángel Revilla que no piensa volver a asistir a ningún evento donde se halle el señor Laporta. Que nos haga un favor a todos y en especial al deporte y no vuelva a aparecer en ningún evento deportivo aún sin Laporta, ni tampoco en programas de este ámbito. Es más, por muy simpático que se haga, que no vuelva a pasear su jeta por la tele, ni su voz por las radios, ni que la tinta, con palabras suyas, vuelva a manchar los rotativos.

Chávez sólo hay uno y ya sobra.

Imagen tomada de Flickr… de un particular.

jueves, 17 de septiembre de 2009

¿A qué huele el amor?


Imagen tomada de flikr.



¿A qué huele el amor?

Eso depende de la edad,

de la vida,

del corazón.

Primero el aroma dulce y suave

del abrazo de una madre

y el rancio traje de un abuelo

que juega en el suelo con su nieto.

Después a una mañana

de soleado domingo.

Pero al crecer empiezan los cambios

y el amor es mojado

como la tierra en el mes de abril.

Y al crecer más,

cuando se encienden los fuegos del cuerpo,

huele al atardecer, frente al mar,

de finales de agosto.

Y en la madurez

el suave crepitar del hogar

en invierno.

Incluso, hacia el final,

huele a un ramo de flores frescas

en el cementerio.

Muchos y ninguno

del amor son sus aromas,

depende de cada cual,

depende de la edad,

depende... del primer beso

y también del último.

Pero, ante todo,

hay que estar vivo.

domingo, 13 de septiembre de 2009

¿Ha reventado la burbuja inmobiliaria?


Últimamente son muchos los medios de comunicación y entidades oficiales que insisten en decir que la burbuja inmobiliaria ha explotado. Palabras que no son contrarrestadas ni por inmobiliarias, ni constructores, ni bancos… ni intermediarios. Sólo los ciudadanos dudan de este hecho, sobre todo cuando tienen que enfrentarse a la adquisición de una vivienda. Los precios apenas han bajado entre un 10 y un 15% en el mercado… ¿Es ese el tan cacareado reventón de la citada burbuja?

Hace un año, cuando la crisis aun no nos había enseñado su letal directo de derechas, las calles estaban llenas de carteles de “se vende”. En estos momentos, cuando más de una familia se debe estar viendo obligada a vender su vivienda habitual para sobrevivir, los carteles escasean ¿Por qué?

Si hemos sido testigos, durante más de ocho años, de un complot de bancos, constructoras, inmobiliarias e intermediarios (y algún que otro funcionario corrupto), para crear y mantener una burbuja inmobiliaria que les reportaba pingües beneficios, no sería posible que ahora se estén aliando para que el inminente reventón (yo no creo que haya estallado todavía) no les genere demasiadas perdidas.

En mi buzón aparecen frecuentemente papeles dónde “un particular” está interesado por un piso en la zona. Cuando lo contactas todo son pegas y termina haciéndote una oferta que no alcanza ni el 40% del valor en el mercado actual, después intenta regatear y puede llegar a subir hasta el 60%. Hay se queda, lo que da a entender que el precio real de los pisos es un 40% más bajo que el del mercado actual… Pero esa no es razón para que las ofertas hayan desaparecido de las fachadas, sobre todo cuando los intermediarios siguen marchando casa por casa haciendo esas mismas ofertas ¿Entonces cuál es la razón?

Debo reconocer que algo se me escapa, pero no tengo ninguna duda de que existe alguna clase de fuerza, algún comprador avispado, que se ha hecho con ese material sobrante del mercado y que está logrando que el precio nominal de la vivienda se mantenga artificialmente alto. Incluso en edificios de nueva construcción no se llega a ver aquel antaño habitual “venta de pisos”. Recién acabados muestran sus cristales impolutos, sin manchas de pintura, y sólo en un par de balcones aparece un teléfono móvil o el símbolo de una inmobiliaria, sólo los locales restan eternamente en venta… ¿Qué está pasando?

Pase lo que pase, este es un gran paso a tras. Poner diques ante una riada sin dejar escapar algo de agua, sólo sirve para obtener una explosión más violenta, pero algo más tarde. Si la burbuja termina de estallar justo cuando estemos apunto de superar la crisis, sólo servirá para terminar con nuestros esfuerzos por superarla. Por oro lado, si tiramos abajo ahora todo el mercado inmobiliario, podremos empezar a reconstruir este sector sobre una base sólida y bien asentada. Es curioso que las mismas personas que quieren imponer medidas liberales, como el abaratamiento del despido, para solventar la crisis, sean los que están poniendo trabas al libre mercado inmobiliario durante la crisis. Como cambia su percepción liberal cuando es su bolsillo el que se resiente, ¿no?

El mercado inmobiliario empezó a dispararse en 1994, justo al terminar el frenazo del anterior tirón inmobiliario, el del 92. Al principio, la crisis post-olímpica, que se alargó hasta la primavera del 96, mantuvo esa subida dentro de unos niveles aceptables, pero la salida de la crisis y el aumento de la inversión extranjera (especialmente la inglesa) dispararon el mercado de las áreas costeras primero y el de las grandes ciudades después. Con la llegada al poder del PP se tomaron erróneas medidas que favorecieron a los beneficiarios del sector y se inicio una escalada brutal de los precios y donde los fenómenos de corrupción no dejaron de producirse.

Aparejado a este boom vinieron otros fenómenos aún menos controlados: la demanda de mano de obra muy barata (en ocasiones tendente a la esclavitud) y la subida de precio de las materias primas y el suelo. Esos tres efectos colaterales son, por si solos, tan dañinos como la propia burbuja, así que los analizaremos por separado.

La mano de obra mayoritaria de la construcción fue la inmigración ilegal. Por lo general la inspección laboral fue muy tolerante o no supo frenar una tendencia producto de la alegría de ese mercado laboral. Un mercado laboral que, a pesar de la inmensa demanda, no debía otorgar ventajas a los trabajadores como las obtenidas en el boom del 92. Entre tanto, la contratación de inmigración de todo tipo generó una espiral de efecto llamada de la que sólo se beneficiaban los constructores. Con la caída de la construcción, esa bolsa de trabajadores foráneos quedaba sin fuente de ingresos y se vertían sobre todo el mercado, con las mismas condiciones, lo que producía una paralización salarial y extendía la bolsa de desempleo. Si en su momento se hubiese vigilado a este sector, también en este ámbito, la crisis actual hoy sería más leve.

El boom de la construcción solicitó, cada vez, más y más materiales de construcción, haciendo subir sus precios tan sólo por la ley de la oferta y la demanda. Pero además, no había materiales para todo lo que se construía por lo que al principio se empezó por importar algunos de ellos, sin embargo, pronto la industria aumentó su producción. Puede parecer que si se aumentó la producción también se puede reducir ahora, pero no es tan sencillo. Antes del boom sólo las fábricas de ladrillos más rentables tenían cabida en el mercado, con el boom se abrieron factorías de materiales cuyos costes de fabricación eran mayores sin aportar un plus de calidad. Incluso aparecieron factorías de productos de menor calidad. Así mismo, las factorías ya existentes, rebajaron, muchas veces sus controles de calidad para crear más producción y sobreexplotaron yacimientos de materias primas con un encarecimiento suplementario. Volver ahora a las calidades normales y precios originales no será sencillo.

Finalmente, igual que el que compró una vivienda en pleno boom no se resigna a vender más barato, el dueño de suelo edificable tampoco aceptará menos dinero por su posesión. Si tenemos en cuenta que, por lo general, los dueños de suelo no acostumbran a tener problemas económicos dado que sus ingresos no dependen de ese suelo, será muy difícil que el precio del suelo vuelva a bajar.

Con todas estas premisas, el valor de la vivienda que subió de un 500% a un 600% desde 1994 a 2007, ha bajado ahora de un 10 a un 15%, pero debe bajar aún de un 60 a un 70%, para que se pueda aceptar como reventada la burbuja inmobiliaria. Una vivienda que en 1994 costaba 10.000.000 de pesetas, unos 60.000€ hay, con la bajada actual, cuesta de 260.000€ a 320.000€, cuando su precio debería descender a unos 130.000€.

No, la burbuja inmobiliaria no ha reventado ¿Por qué, entonces, las administraciones se empeñan en decir que sí?

Sólo hace falta ver como protegen las ventas de pisos… incluso sus imágenes. Alguien duda de dónde ha salido esta…

viernes, 4 de septiembre de 2009

La gripe de la A a la Prensa.


La gripe A, desde la primavera pasada, ha llenado las páginas de la prensa diaria y minutos de TV y radio con demasiadas puntualizaciones de pánico. Desde el primer momento se empezaron a contar los contagios primero y las víctimas mortales después, en busca de algún macabro record que llevar al libro “Guiness”, pero lo cierto es que estamos ante una gripe más (o influenza que parece una palabra más bonita). La sustancial diferencia de esta nueva gripe con otras es el tipo de virus que no responde a los parámetros proteínicos de las que nos azotan con mayor frecuencia y para las que ya teníamos una vacuna, más o menos útil, que se revisaba anualmente con muy pequeñas modificaciones. De este modo los diferentes laboratorios farmacéuticos se han lanzado a la caza y captura de la fórmula para vacunarnos de la gripe A/H1N1, en una carrera que sospechamos algo tramposa.

Las primaras alarmas se encendieron en México cuando la pandemia estaba ya muy extendida y, dada la estructura sanitaria del país, había dado innumerables casos con final trágico. Para entonces el virus (si es que era originario de este país) ya había traspasado muchas fronteras y pronto se reportaron casos en EE.UU., Canadá, Gran Bretaña, países de Centroamérica y pronto en España. En ese tiempo se había cerrado el país y dejado a los turistas encerrados en los hoteles en una cuarentena tan extraña como espectacular. De una parte el gobierno mejicano intentaba demostrar una dudosa eficiencia y por otro se alarmaba a la opinión pública.

Como era de esperar, el volátil virus de la gripe escapó y pronto otros países basados en la misma eficacia del absurdo realizaron acciones, tan espectaculares como poco efectivas en el mismo sentido, que aún generaron más “pánico” sobre el tema de la gripe A (por aquel entonces aún llamada gripe porcina). Las actitudes rayanas en el racismo de China y Rusia no ayudaron demasiado. Una vez fuera del México, y con la lupa de la prensa enfocando la futura pandemia, cada caso, cada muerte, se convirtieron en noticia que ayudaba a pasar por alto otras que en manos de la opinión pública hubiesen podido tener repercusiones: casos como las consecuencias de la propia crisis en todo el mundo, el prostíbulo de Berlusconi en Cerdenya para los italianos o las corruptelas de cargos del PP en España. Así pues, muchos grupos de poder se vieron beneficiados por este boom informativo y sus medios de prensa afines no dudaron en darle la necesaria relevancia. Con esto ya vemos que las informaciones sobre la gripe A, que tanto nos han alterado, tienen una relevancia informativa muy superior a la que merecen.

Dicho todo esto pongamos en su sitio a esta gripe con unas informaciones más acordes con la realidad.

La gripe, en general, es una enfermedad menos benigna de lo que creemos. Si bien la mayoría de los casos no reportan ningún tipo de gravedad, estoy seguro que muchos, a lo largo de nuestras vidas, hemos padecido algún episodio gripal realmente malo. Estoy casi seguro de que esa gripe no era la tan cacareada gripe A. También en la comparativa gripal de nuestra prensa hablan de unos episodios de influenza, a principios del siglo XX, en que murieron millones de personas. De hecho, anualmente, la gripe de temporada se lleva por delante la vida de unos veinte mil españoles. Seguramente sus certificados de defunción no lo establecen así, por lo general, leeríamos “insuficiencia cardiorrespiratoria”, pero algunos médicos si apostillaran “como resultado de las complicaciones en un proceso gripal”. Si añadimos las septicemias por bacterias oportunistas, deshidrataciones, neumonías, fallos hepáticos y renales, infartos, efectos secundarios por el uso de antigripales y alguna que otra tontería más que pueda matar a continuación de contraer una gripe, tendremos todos esos casos que hacen de la vulgarizada gripe algo no tan inofensivo.

Así pues la gripe común no es una enfermedad tan benigna, pero siguiendo, desde el primer momento, reposo, hidratación, buena alimentación y un tratamiento sintomático simple (antipiréticos, dieta para casos de gastroenteritis, etc.), podemos pasarla en casa sin peligro de formar parte del destacado grupo de los veinte mil. En el caso de la gripe A es lo mismo exactamente. La diferencia de esta nueva gripe con la anterior es que como la mayoría de nosotros no ha entrado en contacto con virus similares, las posibilidades de contagio, en caso de entrar en contacto con el virus son más elevadas. Por lo demás esta nueva gripe es incluso más floja que algunas de las que llegaron en los últimos años (en especial la de 2003). Aunque con la expectación generada, tal vez nos sirva para conducirnos de una forma más apropiada para evitar el contagio tanto de esta como de la otra gripe. Si de verdad están interesados en ello tanto como en obtener una información fidedigna sobre el tema, una compañera de red me ha pasado, mediante su interesante blog, la siguiente dirección que es muy interesante y dedicada en exclusiva a una información veraz sobre la gripe A: http:\\gripeycalma.wordpress.com .

Espero que no cojan ninguna de las dos gripes, pero si les toca, tal y como reza en ese blog, “ante todo mucha calma”.

La imagen se tomo del blog de mi amiga ardilla roja: http://ardilla-roja.blogspot.com/, a ella le debo el conocimiento de ese otro blog tan interesante sobre este tema tan específico y tan de moda.